Lo que más odio de ti

Es raro que le diga a alguien que lo odio, lo que es más, nunca lo he hecho, por lo que se te hará raro que te entregue esto enlistando las cosas que más odio de ti, pero igual creo necesario hacerlo para que entiendas el porqué de mi indiferencia hacia ti, así que te pido que pongas atención a lo siguiente:

Tus ojos

         Te preguntaras porqué si siempre te digo que son muy lindos, pues se debe a que siempre me pierdo en ellos cada que me sonríe.

Tu boca

       Porqué aun teniéndote tan cerca de mí, nunca he podido rozarlos, ni siquiera verlos tan fijamente al punto de que sientas necesario besarme

Tu cabello

       Nunca podre enredar mis dedos entre tus cabellos, nunca los tendré cubriéndome el hombro cuando estés recargada en él.

Tu silueta

       Que enmarca lo que para mí es la perfección, una idea más de belleza ante mí, y unas curvas que denotan una singular forma de caminar, y que a pesar de que he tocado sin ninguna pizca de lujuria, me vuelven loco.

Tu forma de hablarme

       Tan tuya, tan linda y brusca a la vez, y en un tono burlesco y en ocasiones con rencor, que me hace suspirar cuando tu no vez mi semblante.

Tu forma de andar

       Tan coqueta y simple.

Tu simpatía

        Que se apega a tu gran humor.

En fin, espero y algún día leas esto, y sepas que va dirigido a ti, porqué mi firma nunca veras en esta carta.

Del que se ha enamorado de ti, y del que nunca se ha animado a decírtelo.