Nunca habiámos acariciado mejor amanecer
ese que nos hizo trizas la soledad de cada recuerdo
el que alzó mis labios en sus posesiones
el que arde en la llama de nuestros fogones
henchida de placeres dejándome libre en sus secretos
Contemplarle en la cadencia de sus gemidos
fue para mi
copa insinuante
néctar ansioso de su vientre
terciopelo de sus caderas
hendidura luna de coloreadas ansias
donde nos perdíamos la agonía
aromada virtud de amantes
Comprendimos la entrega
cristal que todo lo desnuda
hecho que libera a la espera de vendavales
- Autor: Poeta de las Utopías (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de enero de 2018 a las 11:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 38
- Usuarios favoritos de este poema: Lolaila, Bambú, El Silente Vagabundo, Hugo Emilio Ocanto
Comentarios5
Recuerdos de Itaipú
'piedra que suena'
mece las orillas de la pasión
Felicidades José Adolfo
En cada punto del planeta / las orillas esconden recuerdos / Sólo la brisa complice de aguas / saben del lenguaje tallado / Llevamos ese mapa grabado en la carne Tokki / Gracias
Pasión del cuerpo y del alma..., misterio nunca saciado.
Un abrazo.
Esteban
circunstancia humana / búsqueda incesante / riqueza existencial del hombre / intento indetenible de poetas / también / pasionaria necesidad / Gracias Esteban
Oye con el corazón los suspiros del encuentro que está queriendo entregarse.
Saludos.
ufffff genial interpretación poeta / gracias / Saludos Beatriz
Precioso, apasionado...
Gracias Bambú / placer que me agrada
Maravillosamente apasionado, poeta.
Mi saludo.
Hugo Emilio.
Como apasionado es tu empeño por hacer de la poesía ese oasis de y para la palabra / su esencia y la virtud existencial del hombre Hugo Emilio / enhorabuena tu visita amigo
Mi presencia aquí es para pregonar sentimientos.
Los míos, y los de ustedes.
Nunca es tarde para hacerlo.
Nunca Hago Emilio nunca / enhorabuena
No lo hagas, poeta.
Me despido.
q8uise decir nunca Emilio / nunca será tarde / Feliz noche
Todos los seres nos equivocamos, evidentemente.
Me alegra tu respuesta, hermano.
Pudo haber sido hago. Ha sido mi nombre.
Nunca ha de ser tarde. Tengámoslo en cuenta.
Feliz noche, buen poeta.
Gracias Hugo Emilio
A ti.
Debemos volver a las letras.
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