Ciudades, todas conectan unas con otras, dicen que el asfalto hizo caminos, yo dudo que contengan más que escupitajos.
Sobre el asfalto sólo hay ciudades amurallando el miedo de la gente, los ricos temen que les roben lo que desde el principio ellos se robaron, y del otro lado de las ciudades los pobres temen que les invadan el pobre barrio que les dejaron, ¡ya sabés!, el desarrollo inmobiliario se está quedando sin espacio.
Ciudades, con mega aeropuertos, torres y despilfarro. Fuera de ellas, el barrio tiene olor a narcotráfico, pero no llega el dinero sólo se filtra la sangre por debajo las puertas, ¡al pobre Lencho le han volado la cabeza!, ¿los chicos?, los chicos aprendieron a no meterse con la clientela.
Por las grandes vías del desarrollo deambula la pobreza, en las calles de tercera sólo queda la violencia, el primer mundo confina cualquier residuo de ciudadano a los suburbios, ahí donde se acumula la basura.
En las periferias de las ciudades es donde se encuentra la verdad del desarrollo, lo demás es pura propaganda para esa “clase media”, a la que el miedo no la deja aceptar su pobreza, ni arriesgarse en la empresa propia, porque no tiene más que ese pequeño porcentaje que la excluye de la miseria, le da pánico entrar en la estadística de los muertos de hambre, esos muertos que caminan recorriendo las metrópolis, ese otro tipo de humano que el desarrollo y el progreso no reconoce todavía, la clase media es el licuado social que mantiene unido el armatoste de mundo en el que vivimos.
Entre clases nos matamos, y uno se pregunta entonces, ¿Qué clase de animal es el ser humano?.
- Autor: la flaca (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de enero de 2018 a las 15:10
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 79
- Usuarios favoritos de este poema: migreriana
Comentarios2
Triste y real!!!
¡Enhorabuena!
Una muy contestataria reflexión que me permito leer y digerir en el día de tu cumpleaños, felicitaciones por dos motivos, tu navidad particular y tu talento muy elocuentemente expresado. Leyendo tus líneas se me vienen a la mente tantas válvulas de escape en las urbes como para hacer un aporte sobre la base de un poema-réplica bastante razonado…
“Urbes con un progreso contaminado”
Ante tanto conflicto y problemas
le pregunto al orbe algo desconcertado
en las selvas de cemento y concreto
qué dice el común del ciudadano,
en su conflicto con un equilibrio
que se ha ido resquebrajando
con un entorno lleno de polución
irracionalmente contaminado
y a todo esto hay que sumarle
la interacción de un ser humano
que según erradas leyes sociales
unos son pobres explotados
y una minoría en otro extremo
explotadores con mucho descaro,
sometidos por una ambición
por el poder con medios controlados
a fuerzas de derecha o izquierda
de hipocresía y de engaño,
la crisis existencial es tal
el ejemplo de Cristo han hollado
como a ti mismo, amad a tu prójimo
es mandato pasado y pisado,
que si esa crisis no existiera
el grafiti fuese arte exagerado
producto de la imaginación
de un grafitero drogado,
si la prensa calla un muro habla
una forma de expresarlo,
pero que en definitiva
estamos todos prensados
en un laberinto sin salida
en un callejón cual humo vano
son problemas que no vive
y de los que se siente alejado
al menos relativamente
quien sabe vivir en el campo
en natural armonía vital
como un huraño ermitaño
o como nuestros indígenas
salvajes los han etiquetado,
lo que me hace recordar
un gran poeta afamado
hablemos de lo imposible
de lo posible se sabe demasiado.
Por Hermes Varillas Labrador
1772 14/02/2018
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