HONGO

Invierno llega cruel vacío

El Cielo que llora por un corazón herido

Rayos y estrellas caen en estampida sobre el alma,

La Luz que se pierde con cada latido del corazón

Como niño aprendiendo me siento en la orilla de la banqueta,

Observando como el cielo se tiñe rojo, y las nubes tienen un gris poblado

El azul bendito se ha ido a otros lugares, y la lluvia me empapa el alma,

Tarde me siento en los brazos de mis emociones para saber de tu adiós

Cantar me alegra un poco el alma y me quita la preocupación de cuidar de tu amor

La Alegría no me puede conquistar, la soledad es tan posesiva que te pido perdón,

Eres donde  mi alocada forma de vivir quería reposar, mi ternura dejo de ser suficiente,

El invierno acampo en mi corazón, llevándose el calor de mi alma al vacío del olvido,

El sol tembló sobre mis ojos desnudos, y desgastados de llorar con tanta emoción,

Terrible el sabor de la verdad, sin estar en tus brazos y tus besos no acompañen mis labios,

Amar en el pasado; no es funcional para la mente irracional, la vida que nos condena

La Locura demencial de acordarme solo yo de ti, me sonríe en la obscuridad,

Solo espero te llegue mi olvido y mi renuncia con toda el alma lo deseo

Empiezo ahora a olvidarte no por extrañarte

Buscando antídoto a esta tristeza grande

No buscare culpables solo no debí amarte

Y saber renunciar cuando diste señales

 pensar en mí como empresaria de mi felicidad

Amar sin amar, sin perseguir sin soñar

Alma de inocencia y decencia que perdí,

no será la vida que te preste y robaste siendo vil,

Firmando una cláusula de amor que no acepte

Y el Nido de amor donde habríamos comulgado,

Vere desde lejos;  hoy como arde en llamas,

 Quedando hecho cenizas el amor que prometías…