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Con cierto nerviosismo cerraste la carta. La dejaste en la mesa que está delante de la puerta de entrada, donde Leonard pudiera verla apenas entrara de su trabajo.
Sin perder tiempo te dirigiste al torrente. Ese torrente que varias veces acompañó tu inspiración. En sus orillas nació el personaje de tu novela favorita: “La Señora Dolloway”.
Nadie te vio salir. Silenciosa cruzaste la puerta y te adentraste al bosque en dirección al río.
El día era pleno de luz. El astro rey se hacía presente con todo su vigor, aquel 28 de marzo del 1941. Los aromas de la recién llegada primavera lo envolvían todo. Era un día perfecto para cumplir lo que te habías cometido.
El canto dulce de un ruiseñor te hizo detener de repente. Lo buscaste con tu vista hasta encontrarlo. Ave hermosa que siempre habías admirado. Cerraste tus ojos para disfrutar al máximo tan hermosa melodía. El viento fuerte del este, te trajo de nuevo a la realidad y retomaste tu camino.
A tu paso las flores silvestres te saludaban. La maleza jamás te había visto con tanta premura. ¡Alguna idea tendrá!, ¡alguna musa ronda su cabeza!, pensó el fantástico cedro que acariciaste mientras pasabas. Mientras seguías tu camino.
El Ouse estaba crecido. La corriente era particularmente agitada aquel día.
Un escalofrío te estremeció, mas no quisiste pensar demasiado. Te acercaste a la orilla y comenzaste a recoger algunas piedras metiéndolas en el bolsillo de tu vestido.
En aquel instante te vino en mente la figura de tu madre moribunda. Contabas tan solo con trece años de edad. Fue un dolor intenso que te hizo sufrir tu primer ataque depresivo. Te sentiste sola. La vida te había arrancado al ser más querido, cuando más lo necesitabas ¿Por qué? te preguntaste. La respuesta a tu gemido jamás llegó. Aprendiste a convivir con tan cruento dolor.
Miraste de nuevo el río. Diste otros pasos y de nuevo te agachaste para asir otras piedras. Otro recuerdo vino a tu memoria, tu padre aquejado, dolorido por un cáncer terminal. La vida de nuevo te daba otra cachetada. Tu profunda sensibilidad te hizo sufrir el doble. Escuchaste de nuevo, en ese instante, los gritos de tu padre. ¡No me dejes, te lo pido! Suplicaste en el lecho de muerte. Él tomó fuerte tu mano y expiró. Otro pedazo de tu vida arrancado. De nuevo entraste en el túnel profundo y oscuro de la depresión. Sufrimiento, soledad, impotencia, tristeza profunda, hasta que pudiste, a duras penas, superarla.
Trastorno bipolar, te diagnosticaron. Te refugiaste en la escritura, en tu producción dando a luz obras maestras literarias.
Otros pasos más en el río, otras piedras recogiste introduciéndolas en los bolsillos de tu abrigo. Miraste al cielo, era particularmente celeste aquel día. Te sentìas cansada, agotada, destruida. En ese momento otro recuerdo vino a tu encuentro: Leonard, tu Leonard, tu gran amor.
En estos momentos estaría por llegar a casa. Lo amabas demasiado para que siguiera sufriendo. Cuánta paciencia había tenido con tus ataques de pánico, con tu temor constante. Según pasaban los días las voces que escuchaba dentro de su cabeza habían aumentado. Su mayor temor era la locura. ¡No! No podías permitir que sucediera de nuevo. No tenías fuerzas para seguir.
Te descalzaste, con los pies desnudos entraste al río. El agua aún fría te hizo estremecer. Seguiste con pie firme hasta que no pudiste sentir el fondo y te abandonaste. La corriente te arrastró. Tu cuerpo inerme no opuso resistencia. Tus pulmones comenzaron a llenarse de agua. Una angustia profunda sentiste y después una gran quietud, una gran paz. El afluente te acogió en su regazo ahogando para siempre las voces que te atormentaban, tu sufrimiento, tu desolación, tu impotencia, tu depresión.
Al llegar Leonard encontró la puerta abierta. Se extrañó de este hecho. Lo primero que vio fue la carta la cual tomó con premura. Reconoció la grafía perfecta de su amada esposa: “A ti querido amor. Perdóname”.
Con manos trémulas la abrió y comenzó a leer:
Adorado Leonard
"Siento que voy a enloquecer de nuevo.
Creo que no podemos pasar otra vez por una de esas épocas terribles. Y no puedo recuperarme esta vez. Comienzo a oír voces, y no puedo concentrarme. Así que hago lo que me parece lo mejor que puedo hacer.
Tú me has dado la máxima felicidad posible. Has sido en todos los sentidos todo lo que cualquiera podría ser. Creo que dos personas no pueden ser más felices hasta que vino esta terrible enfermedad. No puedo luchar más. Sé que estoy arruinando tu vida, que sin mí tú podrás trabajar. Lo harás, lo sé.
Ya ves que no puedo ni siquiera escribir esto adecuadamente. No puedo leer. Lo que quiero decir es que debo toda la felicidad de mi vida a ti. Has sido totalmente paciente conmigo e increíblemente bueno.
Quiero decirlo — todo el mundo lo sabe — .Si alguien podía haberme salvado habrías sido tú. Todo lo he perdido excepto la certeza de tu bondad. No puedo seguir arruinando tu vida durante más tiempo.
No creo que dos personas pudieran ser más felices que lo que hemos sido tú y yo" (Virginia Woold).
Virginia, ¡NOOO! – se escuchó un grito profundo –
Corrió sin tregua hasta el río. Encontró sus zapatos en la orilla. Se desplomó impotente sabedor de lo que había sucedido. Llorando lo encontraron abrazado a su carta y al par de zapatos de quien fuera su único y verdadero amor.
No tuvo descanso hasta que encontraron su cuerpo el 18 de abril. Casi un mes de su suicidio. Sus cenizas la sepultó a la sombra de aquel cedro que se encontraba en el camino. Árbol particularmente por ella admirado y querido.
- Autor: Kavanaruden (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de enero de 2018 a las 16:58
- Comentario del autor sobre el poema: En el 136 aniversario del nacimiento de esta gran mujer que admiro mucho. Atormentada historia, duro desenlace de la misma. La vida, ese gran misterio. La carta que deja a su marido la escribió ella misma. La transcribo. Por motivos ajenos a mi voluntad me encuentro ahora un poco alejado de poemas, regresaré pronto, al menos eso espero. Se les quiere lectores, amigas, amigos del alma. Kavi
- Categoría: Sin clasificar
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Comentarios17
Tu trabajo literario más lo escrito por Tokki es para levitar de placer al recordar a V. Woolf / merecido homenaje Kavi / Gracias hermano
Honor a quien honor merece mi querido amigo.
Virginia me trajo de nuevo aunque sea por un momento.
Me alegra que te haya gustado
Te mando un fuerte abrazo
Estremecedor, cuanta angustia acumulada para tomar tan terrible decisión, que tan bien nos compartes en tu relato amigo, que gusto visitar tu espacio, tus letras.
Saludos, feliz día, Alex.
Así es. Nada fácil, pero imagino la desesperación de esta mujer.
En familia viví una situación similar. La depresión es una terrible enfermedad que puede llevar a la persona al suicidio.
Gracias por leerme Alex.
Estimado kavanarudén, demasiado largo el relato para mi, pero te pongo la estrellita por la gran Virginia Woolf.
Amar supone separarte de los demás...Virginia Woolf.
Saludos de miachael.
Gracias por la estrellita.
Si tienes paciencia vuelve y léelo entero, estoy seguro que te gustará.
Un abrazo y de nuevo gracias.
K
Lo intentarré,...pero no te prometo nada.....saludos ......miachael.
Tranquilo hermano.
Estoy un poco alejado de poemas ahora. Entré para hacerle este homenaje a la gran Virginia. Ya perdonarás que no comente tus escritos, espero hacerlo pronto.
Nada grave, espero regresar prontito.
Cuídese del frío 🙂
Muchas gracias K
Dicen que matarse es de cobardes, pero creo que hay que ser muy valiente para tomar una desición así, más cuando te consume tanto dolor.
Excelente escrito mi querido amigo.
Un placer leerte.
Un fuerte abrazo.
De acuerdo con tu comentario amiga.
Creo que hay que tener mucho coraje para hacer una cosa así
En mi familia he tenido la experiencia de una persona muy cercana que sufrió de depresión endógena. Dos intentos de suicidio. Nada fácil para la familia. Imagino que estar siempre con ese peso en la conciencia, esa angustia, ese temor de volverse locos puede llevar a resoluciones drásticas.
No juzgo, no critico y como bien dices, hay que ser muy valientes.
Me alegra que te haya gustado amiga
Por motivos ajenos a mi voluntad estoy un tanto alejado de poemas, espero regresar pronto.
Un fuerte, fuerte abrazo
Se te quiere y mucho.
K
Tremenda y angustiante ha sido la vida de Virginia Wolf.
Y tú nos hacer VIVIR cada palabra de tu relato, Kavi.
Mis más sinceras felicitaciones.
Regresa pronto, hermano del alma.
Abrazo fraterno.
Mi hermano del alma.
Solo me resta agradecer tu comentario.
Eso espero, regresar pronto a esta mi casa, pues así la siento.
Recibe un fuerte abrazo de mi parte.
Se te aprecia y quiere mucho.
Cuida tu salud hermano
Kavi
Señor simplemente excelente !
Muchas gracias.
Siempre bienvenida a este tú rinconcito poético.
Me alegra que haya sido de tu agrado. La figura de Virginia siempre me ha fascinado.
Honor a quien honor merce.
Un abrazo desde estas lejanas tierras.
Kavi
Admiro muchísimo a Virginia, cómo así también a todo aquel que deja correr su sentir a través de las letras. Yo no escribo, solo me dejó fascinar por el Don de todos aquí!
Me ha gustado mucho Kavi, has conseguido que algo tan tragico como un suicidio, me resulte agradable de leer.
Un abrazo Kavi .
Texi (antes Tximeleta)
Mi queridísima amiga
Me alegra verte por aquí
Estoy ahora un poco alejado de poemas, pronto volveré.
Un fuerte, fuerte abrazo
Te quiero
Kavi
Las razones de la vida, las razones de la muerte, las razones del amor, como un laberinto indeterminado en el cual cada uno toma su camino...
Hermoso regalo Kavi... Gracias...
Se te extraña amigo, hoy mas que nunca....
Así es, un camino nada fácil
Duro desenlace en la vida de esta mujer, gran mujer, la cual admiro mucho.
Gracias por tu visita hermano.
Por ahora un tanto alejado de poemas, pronto regresaré.
Te mando un fuerte, fuerte abrazo
Feliz y bendecido domingo
Quién no ha leído a V. Woolf no ha tenido juventud ni aventuras literarias Hoy en la versión de ti maestro de las letras recobra su vivacidad y vuelve a abrir la inmensidad del ingenio creador, del suspenso y la genialidad.
Gracias por compartirlo mi buen Kavi, gran amigo.
Con mucho afecto
JAVIER
Amigo y hermano de letras.
Tienes razón. La pluma de esta mujer es simplemente maravillosa.
Me alegra que haya sido de tu agrado este mi relato.
Te mando un fuerte abrazo.
Kavi
Muy triste lo que aconteció en la vida de ese ser, pero su determinación fue más, por librarlo a él que lo amaba intensamente y sufría con dolor el verlo a él sufrir por ella. Un fuerte abrazo.
Mi querida Lidia.
Así es, es en el fondo una gran prueba de amor.
Estoy un tanto alejado de poemas por ahora.
Te mando un fuerte abrazo
Gracias de corazón
Me deleito con tu historia MiKaviOmarAmor y de paso aprendo . feliz día
tequiero
Viole querida
Siempre un placer recibirte.
Te mando un fuerte, fuerte abrazo
Te quiero amiga del alma
Bello recordatorio a V,Woolf.
Un placer leerte amigo.
Abrazos de Inesita
Gracias Inesita.
Estoy alejado de poemas por ahora.
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Recibe un fuerte, fuerte abrazo.
Se te quiere.
Triste y bello Kavi, una gran escritora que se inmortalizó en sus obras, una vida llena de sobresaltos, tristeza y admiración por las cosas bellas.
Ha sido grato visitarte.
Un abrazo Kavi.
Gracias Yalin
Me alegra que haya sido de tu agrado.
Por ahora estoy alejado de poemas por motivos ajenos a mi voluntad.
Pronto regresaré.
Te mando un fuerte abrazo y gracias de nuevo.
Kavi
Ya te espero Kavi 🙂 no hay problema.
Ten un lindo día.
Uyy que estremecedora carta...
se me fue la vida leyendo,
porque son cosas que suelen pasar,
y solo el AMOR FUERTE, sostiene un AMOR así, que manera de amar con el alma y la vida, me ha estremecido, abrazos mi bello Kavi y mis te quiero maresssss
Mi Alícia del alma.
Muchas gracias por tu visita amiga querida.
Por ahora estoy un poco alejado de poemas por motivos ajenos a mi voluntad. Pronto regresaré.
Me alegra que te haya gustado
Te mando un fuerte, fuerte abrazo. Todo mi cariño y amistad
Te quiero 😘
Si vi en google que era su aniversario
Merci por compartir
Un abrazo.
TVB
Gracias amiga
Ahora un poco alejado poemas por cuestiones ajenas a mi voluntad.
Espero regresar pronto
Te quiero
TVB
Tranquilo, cuando podemos, se hace cuando no, pues paciencia, ya los dicen las abuelas en sus refraneros ''primero la obligacion, después la devoción''. Espero estés bien por eso.
Hasta mañana.
TQM
TVB
Amigo y poeta insigne, Kavi, muy bueno como todo lo que sabes hacer uniendo numen y pluma.
Felicitaciones gran vate.
Tu amigo por siempre.
Condorandino.
Muy instructivo.
Gracias mi amigo y poeta.
Un abrazo
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