Trescientos sesenta y cinco días son del año y aún así no te olvido ni soñando, hasta en mis peores pesadillas estás abrazandome, refujiandome en tus brazos y alegrando mis momentos, esos tan amargos; aún mantengo tu radiante sonrisa como aquella primera vez en que marcaste mi vida, y como una daga que se incrusta, así llegaste tu... metiendote en mi pecho y en mi corazón.
Veinticuatro horas son un día, y cada segundo, te siento hasta en la brisa como un susurro que me dice... te extraño vida mia. No soporto ya, alejarme de tu lado, no aguanto más que esté oscuro hasta de día.
Parece un sueño que de mi mano sigas y al despertar un nuevo día, las metas sigan avanzando y al ver chamitos correteando por la calle, mirarnos a la cara y sonreir, al imaginar como serían los nuestros. Yo solo miro al cielo y pienso, que hermosa es mi novia, mi esposa y mi vivir.
Aún escucho en la distancia la voz de tu corazón, esa que me calma cuando entro en depresión, y aunque el tictac del reloj se haga un poco lento, pronto estaremos cumpliendo nuestros sueños y muy buenos momentos.
Tu no seras mi reina Isabel, pero serás princesa, la musa de mis letras, la que con un beso me lleva a las estrellas, ya que eres luna en mis noches bohemias.
HENRY RUIZ
29 DE ENERO DEL 2018
BARINAS, VENEZUELA
- Autor: henry ruiz (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de enero de 2018 a las 12:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: HENRY RUIZ, Will Funes
Comentarios1
Admirable inspiración
Gracias amigo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.