Latigazos, mil castigos.
Aquí me encuentro, pagando mis pecados.
Nunca, ningun golpe dolió tanto.
Como estas cicatrizes que me han quedado.
Me encuentro acá muy lastimado.
Pues Lucifer me ha violado.
Y de un mordisco el alma me ha sacado.
Me despido, ya no queda mas nada de mi.
Ni siquiera recuerdos de lo que se siente existir.
Es demasiado grande mi lastimadura.
Y demasiado grande lo poco que logro sentir.
Nena, te juro que no te engaño
Te dejo un beso y un te extraño.
Y un susurro mas que sincero.
Diciendo lo tanto que te quiero.
- Autor: Ezequiel Gonzalez (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de enero de 2018 a las 19:25
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 22
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