Con su mirada, mi alma se ve expuesta.
Con su presencia, mis sentidos se desorientan.
Su aroma, mi perdición, y en lo más profundo de mi ser
un deseo ardiente vuelve a nacer.
Con sus manos, mi mente perdida está.
Con sus labios, la magia actúa tan fuerte una vez más.
Perdido en su mirada, preso puedo estar.
He caído en su inquietante sonrisa
Tan fuerte es, que no puedo vivir sin ella.
Ella es el viento que acaricia el campo,
Ella es primavera de lirios blancos y
La silueta del sol al finalizar el mar, en una tarde de verano.
Ella también es la armonía de la música,
La compañía de una canción con sus notas
Hablando de ella.
En su esencia, fuerte y sutil,
Apasionante y retraída.
Atrayente deseo de volverte ver, se abre la brecha
De lo efímero del tiempo
Porque eterno se vuelve en tus brazos
El instante eterno de tenerte a mi lado.
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Comentarios2
Bello!!!
Muchas gracias.
¡Qué palabras tan sublimes y delicadas!
Me gusta como te expresas con las palabras...
No dejes de publicas y ¡Bienvenido a poemas del alma!
Muchas gracias por tu opinión, seguiré escribiendo.
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