Y la historia se repite.
Termina y vuelve a empezar.
Lo que sucedió hace tiempo
de nuevo se vuelve a dar.
Amaba yo a mi esposa
como nadie supo amar
pero la parca celosa
me la vino a arrebatar.
Y así fue que en poco tiempo
tras cruel enfermedad
se la llevo de mi lado
dejándome en soledad.
Al tiempo rehíce mi vida.
Otro ambiente, otro lugar.
Nueva vida, nueva esposa
me dieron estabilidad.
Ha ido transcurriendo el tiempo;
tras años de felicidad,
la historia se ha repetido
con exactitud sin par.
Idénticas circunstancias.
Misma cruel enfermedad
está acabando con ella
y se me la va a llevar.
Mi destino se repite
¿cuándo va a terminar?
El tránsito es inminente.
Veo la parca rondar
cerca de ella acechando.
Espera su oportunidad.
Volveré a quedarme solo.
Me aterra la soledad.
Habré de repetir la historia.
Habré de volver a empezar…
. . .
Barcelona 11 febrero 2018
- Autor: josecarlosbalague (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 14 de febrero de 2018 a las 15:32
- Comentario del autor sobre el poema: Al fallecimiento de mi primera esposa publiqué en este foro el poema "Muerte de la esposa". En él vertí mi estado de ánimo interior por su muerte. Transcurrió el tiempo. Rehíce mi vida. Publiqué otro poema: "Transcurso del tiempo". En él decía que había reecho mi vida; otro lugar; otra mujer, y había recuperado la paz. ¿Os acordáis? podéis leerlos en Poemas publicados, en mi Perfil público. Ahora la historia se repite. La muerte de mi última esposa, Graciela, Graci, es inminente, y de nuevo voy a quedar solo. Os mando el tristísimo poema que he escrito.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 38
- Usuarios favoritos de este poema: Rafael Rec, Alfredo Daniel Lopez, Eduardo ad
Comentarios2
Estoy impresionado amigo....
TE MANDO UN FUERTE ABRAZO.
Muchas gracias. Rafael
Profundo y sentido Romance amigo Balague.
Se respira el ingrato olor de la parca, que viene en tu desdicha otra vez a visitar... Si para tu desdicha hubiera respuesta, como me gustaría saberla. ¿Quién lo ha dicho, quién lo sabe; de las penas que en el corazón cabe?
Mi apoyo desde este fuero amigo, mi pena y mi consuelo por la tristeza y el que parece un irremediable duelo.
Alfredo Daniel.
Cierto. No caen lágrimas de mis ojos pero tengo el corazón empapado.
Gracias por el consuelo.
Balagué
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