Sombra de lo que fui,
lejos quedo la inocencia,
recuerdos de aquellas calles,
con luces tremulas.
Aunque despacio,y sola
se van abriendo las puertas,
de mi memoria.
Aun veo aquel jardin
que una vez entre,
pero no encontre la puerta ,
para salir.
Era mi primer amor,
con la mirada fija,
y las manos quietas,
siempre dormidas.
Como por encantamiento,
en mi soledad,
a las niñas fatales
yo quise amar.
Y una dulce noche
que bese unos labios,
aquellas torres oscuras
se iluminaron.
No era la niña,
ni mi amor soñado,
pero senti su cuerpo,
junto ami “apretado”
Silencio,
uno y mil silencio,
escuche susurros,
y un temblor de pechos.
Unas manos torpes,
un temblor de dedos
al apartar su ropa
al tocar su cuerpo.
Excitación , placer,
ruidos , miedos,
cuanto querer dar,
en los años primeros.
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Autor:
el duende (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 5 de mayo de 2009 a las 15:15
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 92
- Usuarios favoritos de este poema: Luis Cornelio K.
Offline)
Comentarios5
Muy lindo poema sensual y ardoroso!
Saludos .....Pepita
Ay esos primeros años donde todo tiembla, hasta lo que no queremos que tiemble, siempre vuelven a la memoria esos amores mi querido duendecillo, es un poema muy nostálgico en su amorosidad.
saludos
me nekanto!! me kedo kon todo jejeje amis faboritos
abrazoz de mi parte para ti vale bye seguire leyendote
Bello,esos primeros momentos nunca se olvidan,siempre quedan grabados en nuestra memoria.Un beso.
Cuánta nostalgia! Nunca se olvida el primer amor, el primer beso, los primeros temblores (suspirando) Me retiro toda melancólica.
Hermoso.
Saluditos.
Fer.
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