Esta lluvia que ciega los cristales
trepando por los siglos, por los huesos
y ese niño con el rostro perdido
arrullado en el grito de la nada
Hasta cuando, señores, hasta cuando
se sacude sin llanto la miseria
a veces me pregunto lo que pasa
al placer de cambiarse, de camisa
La lluvia que contemplo y no me moja
de tantos que mueren por culpa ajena
y le pregunto al buen Dios, hasta cuando
consentirá tal crimen, tan horrendo
El calor de esta fiebre que os ofende
es mi pluma, en su lucha por los niños
y si vengo ante vos para quejarme
es por el fiero ardor de mis amores
Mece el aire las sombras suavemente
ondula el tren por la campiña verde
un nuevo amanecer habrá mañana
pero cuando amanece al niño pobre
Terrible es contemplarlos marchitados
reflejando su cara la de un viejo
a pesar de tener tan pocos años
a pesar de que mueren poco a poco
- Autor: alejandro guardiola ( Offline)
- Publicado: 28 de febrero de 2018 a las 09:07
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 35
- Usuarios favoritos de este poema: Texi, ADANS BECMAN, María C.
Comentarios4
Me a gustado mucho....
Gracias por compartir...
Saludos...
Rav
Gracias por tus palabras sobre el poema RAVNIKO, saludos
Está al alcance de la mano, quizás se volatiliza o no...Todos tenemos hambre de libertad...Saludos.
La mayoría ADANS tienen hambre de llenar su bolsillo y poco les preocupa la vida de los otros, saludos
Muy cierto a veces una cara joven queda envejecida por los problemas y circunstancias de la vida, excelente poema
Un besito.
Si ISISZKT, es terrible ver en las noticias niños que aparecen en las playas ahogados, o hacinados olvidados por un mundo cruel, esos niños de hoy que sobrevivan solo podrán sentir odio hacia sus agresores, un besito
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