Allí donde has ido,
donde el sonido esconde su partitura,
donde comienza el largo
camino el olvido;
donde llegan las fronteras
del sueño y la palabra.
Donde la mortaja arropa
la débil exaltación de la transfigura.
No veré mas tu rostro,
ni entrelazare tus manos.
Un nudo gordiano me atraviesa
la manzana de Adán
impide que mi alma grite de angustia.
Me ahoga el dolor de lo perdido,
de verme solo sin el vaho de tu boca,
sin la sonrisa de tus labios
Sin el loco torbellino de tus pasos.
Allí donde has ido,
me estarás esperando como novia.
Angustiado por mi existencia vana
reflexivo y taciturno no podré verte.
En vano recorrerás la bóveda celeste
buscando el arco pélvico entre las estrellas moribundas.
Ahora que eres la nada,
que tienes la fuerza mutable
del pensamiento y la memoria
Que dejasteis la líneas y los contornos
para volverte la cara de los cristales
reflejo lumínico de la sombras de tus ojos.
Se que no podrás volver;
pero estaré allí para rodearte
con la luz de los soles que se extinguen.
Cuando al igual que tú
viaje al otro extremo de la luz
iré reflexivo y cauto
a darte esos abrazos que te adeudo.
Iré a contarte la otra historia de la vida
aquella que escribisteis después de tu partida.
- Autor: Kleber Exkart ( Offline)
- Publicado: 16 de marzo de 2018 a las 16:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 35
Comentarios1
Buen escrito.
Cuando al igual que tú
viaje al otro extremo de la luz
iré reflexivo y cauto
a darte esos abrazos que te adeudo.
Iré a contarte la otra historia de la vida
aquella que escribisteis después de tu partida.
Saludos
Gracias, saludos.
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