En el subconsciente de tus memorias

Comenzando a escribir

Veo una generación en decadencia,
cortando venas como si fueran rosas.
Una nación nueva se asoma,
pero nada me atrae ni me gusta.

Se ha perdido la emoción de la vida,
las costumbres se pierden,
las tradiciones mueren,
las palabras suenan groseras,
irreverentes, sin presencia.

Si no lo entiendes, olvídalo,
no hay tiempo para los recuerdos,
no hay explicaciones para nada.
No estoy exagerando,
solo desbasto lo que mi alter ego piensa.

Siento cómo el aire me toca,
cómo el oxígeno lucha porque viva.
Es un estado hipnótico de vida.

El colegio solo es palacio,
sin reyes ni princesas,
ni lacayos que sirvan a los poetas.
Transitan almas sin rostro,
nombres sin pareja,
amores sin terminales.

Una colección de buena música
me inspira a crear algo que llamo poesía,
pero, ¿qué es la poesía si no expresa?
¿Qué es un café sin azúcar, o la crema que lo bate?

Cómo me enferma todo,
cómo me produce coraje
que el amor no piense,
que las rosas lastimen,
que las caricias solo curen
un poco la herida que dejan.

Las naciones son nuevas,
las tradiciones mueren de a poco,
mientras la costumbre alza la voz,
y muerde todo lo que en verdad valió algo.

Si el amor nos libera,
¿por qué siento que estoy prisionera
en el subconsciente de tus memorias?