Soy una profeta
De mi vida,
Lo soy
Deliberada y cansinamente.
Pero,
Qué no soy?
Me escondo en el absurdo
Que subsiste entre lo fácil.
Racaneo situaciones
O me acoplo
A las volátiles mentes
Que se forjaron con odio.
Soy profeta
Con mi testimonio en ruinas
Cosecho la guerra.
No me creo suficiente para que me comprendas.
Tengo un miedo escéptico
Todo lo veo patético.
Soy la
Soy
La profeta .
En mis venas se esconde
Represión de los mortuorios.
Repelo
Los sucesos del diario;
Monopolio introspecto
En la norma del más adepto.
Soy
La profeta
Que habla.
Que cuando hay que guardar silencio:
Habla.
Una duda aguarda en mi mente,
Fijo, será la incorrecta.
Concreto momentos fantasiosos
Donde prima la rebelión de mi ser
Con tal de añadir facilidad
Pa cuando el estado ya sea habitual.
Mediáticamente me comporto.
Lloro por dentro
Cuando siento
Tu aforo emocional
Intentando habitar
Tu plaga mental.
Y la mía,
Que a veces cae
Tras varios golpes
Sopesando la retahíla
Del juez torturador
Que me causo con la vida.
Soy profeta.
Podemos dejarnos de hostias
Y
Volver a la cueva.
Podemos avanzar
Y olvidar
Las reprimendas.
Mis profetizaciones
Son cúmulos
De pegajosas declinaciones
De liberarme la boca.
- Autor: Chamana (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de marzo de 2018 a las 06:18
- Categoría: Fábula
- Lecturas: 68
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino
Comentarios1
Interesantes y filosóficos pensamientos!
Espléndidas letras!
Un gran abrazo!!!
Muchísimas gracias, te devuelvo el abrazo 🙂
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