Episodio 1 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-487978
Rodolfo –Rudolf– me observaba desde la puerta, y me dijo:
«No espero que compartas ni comprendas la idea que nosotros tuvimos de la Historia. No te juzgo. Sólo te pido que tampoco me juzgues ni me condenes hasta que hayas escuchado nuestro punto de vista, hasta el final. Ve a secarte, hombre, que te enfermarás, y ven, que el café está listo. »
En el baño, consideré mis posibilidades: si me ponía a argumentar o a intentar razonar con él, es muy probable que se pusiera violento. Yo no iba a cambiar su forma de pensar. Por otro lado, el tipo se había portado bien conmigo; me ayudó en la ruta, y no tenía ninguna necesidad de hacerlo, me brindó la hospitalidad de su casa, hasta me invitó a comer ¿qué necesidad tenía de contradecirlo? El hombre quería hablar: había que escucharlo. No criticarlo, no argumentar, no replicar, no debatir, ni dar lugar a controversia. En unas pocas horas, la batería estaría cargada y yo podría irme tranquilo como vine.
En ese estado de ánimo, volví con Rudolf, acepté el café humeante que me ofreció, hice un comentario estúpido sobre la calidad del café, y me arrellané en un sillón con mi taza en la mano, dispuesto a escuchar al nazi con quien el destino me había cruzado.
«La historia post Nüremberg –comenzó a decir– ha tratado de explicar el advenimiento a la Tierra de la civilización nacionalsocialista como el delirio y la megalomanía de un sifilítico y de un grupo de sus secuaces, obnubilados por su retórica y por la hiperinflación. Este argumento, que no resiste el menor análisis, ha sido desarrollado y difundido con el sólo objetivo de ocultar las tremendas fuerzas sociológicas, psicológicas, políticas y espirituales que tuvieron lugar en la Europa de la primera mitad de este siglo, y fue un plan concebido con absoluta premeditación y ejecutado con precisión.
«Antes que nada, hay que comprender que la ciencia y la filosofía cartesianas y newtonianas, el mundo positivista y mecanicista, estaban ahogando a la Humanidad, y el mundo estaba a las puertas de un nuevo período oscurantista, que duraría más de mil años. Grandes fuerzas, muy superiores a las humanas, lo habían concebido así. La ciencia muy pronto declararía que el Universo había sido descifrado, y las potencias de la Naturaleza se cerrarían para nosotros.
«Para que te des una idea, hacia fines del siglo XIX, el director de la oficina de patentes de Estados Unidos renunció, y argumentaba en su renuncia que “ya no había nada más para inventar”. Marcellin Berthelot, unos años después, decía que “el Universo ya no tiene misterios”. Simón Newcomb demostró matemáticamente la imposibilidad de volar con algo más pesado que el aire. El profesor Lippmann, en la misma época, le dijo nada menos que a Helbronner que “la Física estaba acabada, clasificada, archivada y completa, y que haría mejor en emprender nuevos caminos”. Clausius demostró “científicamente” que no era concebible otra fuente de energía que el fuego, y que la energía, si se conserva en cantidad, se degrada en calidad.
«Pero, en toda Europa y me consta que también en América, incluso también en la Argentina, como lo supe mucho después, ciertos círculos jóvenes intelectuales buscaban subterráneamente nuevos caminos.
«Algunos hombres más evolucionados ya hablaban de realidades que la ciencia ortodoxa negaba sistemáticamente. »
Debo haber realizado algún mohín inadecuado porque replicó:
«Debes entender, y coincidir conmigo, que algunos hombres están más adelantados en el proceso evolutivo que los demás. Lo contrario es no comprender el proceso de la evolución.
«La ciencia pretende mostrarnos las diferentes especies como escalones, como saltos que va dando la vida, como si las especies evolucionaran de pronto y se convirtieran en otras, y mágicamente la especie superada se extinguiera, inservible, gastada.
«Esto es un error. Natura non facit saltum. Más bien la vida es un continuo evolutivo desde los primeros unicelulares hasta su culminación, que no pretenderé decir que sea el Hombre.
«Toda la taxonomía no es más que una abstracción mnemotécnica. En realidad, no existen las especies, porque no hay dos individuos iguales. Veamos, ¿cuál es el antepasado del hombre? ¿el mono? ¡Error!, el hombre y el mono descienden de un antepasado común, sólo que los monos evolucionaron en un cierto sentido y el hombre en otro. Toda la Evolución es expresable como la ínfima diferencia entre un padre y su hijo, como el fuego que va quemando la hojarasca, va cambiando de forma de hito en hito, crece o se apaga aquí o allá.
«Entonces, dado que todos los individuos somos distintos, también todos los humanos se encuentran en un diferente estadío evolutivo. Los hay primitivos, subhumanos, y también, y esto es lo importante, conviven con nosotros los más evolucionados, los más perfectos, las luces y los guías de la Humanidad.
«Había entonces, como te decía, algunos de estos hombres que percibían una realidad superior a la realidad cartesiana, una hiperrealidad. Los poderes escondidos en la materia, que fueron revelados a los enemigos del Reich para su destrucción, la investigación de los estados de supraconciencia, los misterios de la dimensión estática del tiempo, los medios de comunicación telepática e incluso de la influencia de la mente sobre la materia, secretos conocidos por ciertos grupos de hombres y recibidos de los Maestros Antiguos, ya estaban siendo revelados para provecho de la Humanidad.
«En Alemania la Historia reciente había abonado el terreno para que estas y otras doctrinas arraigaran provechosamente. Había una clara percepción de que no existía ningún futuro disponible, de fin de los tiempos. No puedo describirte acabadamente esta desazón, esta convicción de vivir sin sentido. También, debo admitirlo, la economía y la política internacional y local, y la degradación de nuestras instituciones, colaboraban a este estado de cosas. Entonces surgieron en nuestro país, disfrazados de literatura, de sistemas herméticos, y también de liderazgos políticos, ciertos postulados contracorriente que venían a llenar este vacío.
«Hitler fue uno de ellos, ni mejor ni peor que los demás. Pude asistir, en el invierno del 19 al 20, a aquellas memorables asambleas del Partido Obrero Alemán. Al principio, sólo encarnaba la esperanza del pueblo alemán de volver a ser una nación. Yo, como tantos, me uní fervientemente a las filas de la Juventud Hitleriana, y me tocó participar, junto a muchos héroes, de momentos memorables.
«El 4 de febrero de 1920, tras partirle la cabeza a algunos judíos comunistas, presencié el comienzo del romance de Adolf Hitler con el pueblo alemán, con su discurso memorable frente a más de dos mil personas, en la Hofbräuhaus, en Münich.
«Yo estuve en febrero del 21 en el Circo Krone. Y fui uno de los cuarenta y seis SA que defendieron la Hofbräuhaus en noviembre de ese mismo año. También estuve en la Konigsplatz en el verano del 22, y, poco después, en octubre, en Coburgo.
«El 9 de noviembre de 1923, a las 12:30 del día, poseídos de inquebrantable fe en la resurrección de su pueblo, cayeron en Munich frente a la Feldhernhalle, en el patio del antiguo Ministerio de Guerra, y a mi lado, muchos amigos, Kurt Neubauer, Karl Laforge, Andreas Bauriedl, Martín Faust, tantos otros.
«Pero el cambio, el gozne de la Historia se produjo cuando se reunieron Los Siete para fundar el Partido Nacionalsocialista. A partir de ese momento nada fue igual.
«A partir de entonces, todos los alemanes fuimos nazis. Todo el que te cuente otra cosa miente. El mensaje del Fürher atravesaba los corazones y los espíritus, encendiendo en todos nosotros una especie de llama sagrada, un fuego hipnótico que nos abrasaba, un fuego ario que debería iluminar al mundo, oponiéndose al hielo que pretendía cristalizar la humanidad por un milenio, ese glaciar semita que estaba arrasando a nuestro planeta.
(Continuará)
Episodio 1 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-487978
Episodio 2 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-488135
Episodio 3 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-488302
Episodio 4 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-488422
Episodio 5 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-488548
Episodio 6 : https://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-488679
- Autor: Julián Centeya (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de marzo de 2018 a las 00:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 51
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, Texi, María C., Gisela Guillén, kavanarudén, Lore Cruz
Comentarios5
Uffffff!!!!
Nos sentimos cómodos y seguros en nuestro entorno civilizado, pero a poco andar se esconden mundos que desconocemos y nos acechan.
Basta con alejarnos un poco....
Los tenedores, pueden tener de cuatro a un diente y pueden aparentar utilidad, belleza, o cualquier razonamiento organizativo de la actividad social.
Pero lo importante, es para qué se usa ese tenedor, para pinchar la carne del bife, o para pincharse con torpeza el ojo.
Buen manejo de los conceptos, en el monólogo del alemán.
Un abrazo.
Esteban
El monólogo fue lo que más me costó escribir. Aunque no se note, esta novelita tuvo meses y meses de investigación previa.
Un abrazo
Lo que más cuesta, es ponerse en la piel del otro y después regresar...
Un abrazo.
Esteban
Interesante espero el próximo capítulo
JAJAJAJJAAA
Acabo de publicarlo !!
¡¡OSTRAS!! Si el 1º fue interesante este está de impacto, espero la parte siguiente!!
Sé la historia de Hitler era un demente, un total paranoico, un ser que no tenía SER!!
He tratado, en esta novelita, de darle un giro aún más siniestro, más emparentado con lo demoníaco.
Veremos si lo logré...
Muy bien cuando se dice que la historia depende de quien la cuente. Muy interesante la argumentación, la historia en sí.
Quien iba a decir que aquel hombre a caballo iba a tener tal bagaje histórico y cultural.
Seguiré leyendo y después te daré mi humilde opinión.
Seguimos.
Una aparición venida del misterio, en la mitad de la noche....
Siga que hoy termina
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.