"VEN"

Sin ser nada tuyo,
sabiéndome fuera
de la parte de tu
mundo que descontrola
el corazón…
Sin reproche alguno
y sí, eterna
gratitud, es que te estoy
extrañando tanto
que a gritos te llamo
con los ojos
entornados, haciendo
que duermen,
por si aparece tu lumínica
y de mi vida,
única y adorada voz.
Como si sólo ella despertara
la desidia de mis
anhelos de algo semejante
al verdadero amor.
Pero te alejas responsable
por no dañar
a quien sabes, crédula,
sola, quebradiza,
e imposible a todas
luces, capaz.
Porque a tu forma,
me quieres en verdad.
¡Te echo en falta!
No quiero callarlo más.
Estas lágrimas
que vierto ahora, no
serán las últimas,
no lo serán, mas son
de amor del bueno,
de ése que tú,
no me puedes dar.
Pero…pero…yo te quiero.
¿Dónde estás?
Todo lo que se aleja lento
y sin dar guerra,
termina recordándose
un día, el día
en que sabrás que me
olvidaste sin más.
Y tal vez yo, siga
extrañándote, como en esta
penumbra que te llama…
¡Ven! Y no sé ya,
si vendrías, si vendrás.
Pena mía,
haberte conocido.
Orgullo mío…
Tu noble honestidad.