Hermosa dama de negro, la esperanza del mundo.
Hechos a cada segundo, dueña del tiempo.
Eres inevitable, yo corro tras de ti y algún día te alcanzaré.
Caminas sobre nada, pones fin a mis enigmas, a mis miedos, a mis tristezas.
¿Por qué temerte a ti? Hermosa y eterna. El hombre te mancha con ideas, el mundo te esconde.
Das luz, das sentido a la vida. Eres el deseo de muchos y el odio de otros.
Nadie te conoce y el que vive a tu lado se aleja de la realidad.
Más allá de la verdad, de lo bueno o lo malo; eres un solo indivisible, indomable, incomprenido.
La cárcel de algunos, de los que temen su destino. Eres libertad.
Todo tiene su precio, y el tuyo es alto.
- Autor: Eber R. Guerrero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de abril de 2018 a las 02:00
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 28
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.