Si ves que mi mirada
se pierde en el vacío
con el ceño fruncido
y la boca entreabierta
y acaso se abrillantan
de lágrimas mis ojos
no te atrevas a sentir
ni una lástima por mi
porque voy a volver.
Yo siempre vuelvo.
Si te cuentan que ahora
desayuno con whisky
y me paso los días
empastado y borracho
fumado e inconsciente
en el fondo del pozo
no te atrevas a rodar
ni una lágrima por mi
porque voy a volver.
Yo siempre vuelvo.
Si desciendo al infierno
a charlar con el Diablo
y a probar los horrores
que me den un descanso
al espanto dantesco
de la vida asesina
no te atrevas a penar
ni un instante para mi
porque voy a volver.
Yo siempre vuelvo.
Yo siempre vuelvo como la primavera
Como el zorzal. Como la luna llena
Porque sé que en el juego de la vida
no se incluye la opción de abandonar
Porque aprendí que mientras siga vivo
debo cumplir la imposición sagrada
de arañar cada cacho de alegría
aunque queden las uñas en la cáscara
Porque la vida sigue y es ahora
Porque de cualquier modo estoy aquí
Porque he sufrido ya lo que sufrí
y cada día traerá una nueva aurora
De mi fracaso y de mi error me absuelvo
y me perdono todas mis derrotas.
No sientas compasión por mi alma rota
porque voy a volver. Yo siempre vuelvo.
- Autor: Julián Centeya (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de abril de 2018 a las 10:10
- Comentario del autor sobre el poema: Si te postran diez veces, te levantas otras diez, otras cien, otras quinientas... No han de ser tus caídas tan violentas, ni tampoco por ley han de ser tantas. Con el hambre genial con que las plantas asimilan el humus avarientas, deglutiendo el rencor de las afrentas, se formaron los santos y las santas. Obsesión casi asnal para ser fuerte, nada más necesita la criatura. Y en cualquier infeliz se me figura que se rompen los garfios de la suerte... ¡ todos los incurables tienen cura cinco segundos antes de la muerte! No te des por vencido, ni aun vencido. No te sientas esclavo, ni aún esclavo. Trémulo de pavor, piénsate bravo, y arremete feroz ya mal herido. Ten el tesón del clavo enmohecido, que ya viejo y ruin vuelve a ser clavo; no la cobarde estolidez del pavo que amaina su coraje al primer ruido. Procede como Dios que nunca llora, o como Lucifer que nunca reza, o como el robledal, cuya grandeza necesita del agua y no la implora... ¡que muerda y vocifere vengadora ya rodando en el polvo tu cabeza! /Almafuerte
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 96
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., Luibarca, Amalia Lateano, Jorge Horacio Richino, CUARTEL DE POETAS LOCOS., María C., Tatan Love, Irene.., Texi
Comentarios11
MARAVILLOSO.!!!
Resurgir del fondo del pozo, volver a vivir.
Que bello te ha salido, sos un gran poeta.
Me dejaste sin palabras.
Felicitaciones.!!!!
No me convencía el final. Le agregué una estrofa y me parece que ganó. ¿Qué opinás?
Es la mejor, la mas intensa, la verdadera resiliencia.!!!!
Si, le faltaba remate. Y en el final había que repetir el estribo
Me alegra mucho que te haya gustado. Es un mensaje de esperanza
me encanto,tiene mucha fuerza interior,saludos.
Gracias, Yolanda. Me parece que con esa estrofa final mejoró un poco ¿no?
la verdad la senti vigorosa desde el principio,pero si,remataste muy bien con la ultima estrofa.por cierto,te felicito por tu narracion en varias publicaciones.te felicito.aunque no pude comentar con calma si lo fui leyendo.una experiencia inigualable,todos esos temas nazis a mi me encantan
Gracias !! Qué bueno que te haya gustado.
No le tenía mucha fe a esa novelita, pensé que tanta argumentación podía resultar tediosa.
Además, ¡no quería que nadie piense que la reivindicación del nazismo era mi opinión!! JAJAJAA
Pero al final gustó. La obra tiene vida propia, y esa vida se la dan los lectores
Abrazo !!
!!!Hurraaa, excelente poema Hipp
lo he disfrutado casi sin respirar, me encanta, saludos.
Gracias, pero le faltaba final. Decime qué te parece esa última estrofa
Porque la vida sigue y es ahora
Porque de cualquier modo estoy aquí
Porque he sufrido ya lo que sufrí
y cada día traerá una nueva aurora
De mi fracaso y de mi error me absuelvo
y me perdono todas mis derrotas.
No sientas compasión de mi alma rota
porque voy a volver. Yo siempre vuelvo.
!!!Excelente Hipp se amarró perfecto a al poema, abrazos.
Ahora más o menos me conforma.... más o menos quedó...
Gracias !!! Un beso
Nada de más o menos Hipp, está !!!excelente, un abrazo amigo.
Muy bueno!!!!.
Luchar por renacer, sin concesiones, sin lamentaciones, con la convicción de conseguirlo.
Un abrazo.
Qué bueno que te haya gustado, pero me parece que el final no estaba bueno. Dame tu opinión de esa última estrofa que le agruegué
Bella declaración querido poeta.
Un abrazo fraterno
Saludos
Gracias, Amalia !!!
Que bueno que te haya gustado
Abrazo fuerte
Seguramente y por lo que te conozco, volverás... y no con la frente marchita!
Magníficas letras!
Me gustó mucho este poema que refleja una resilencia absoluta e indestructible!
Mis aplausos y un gran abrazo!!!
Muchas gracias, maestro !!! Un honor este elogio, viniendo de usted...
Un abrazo grande, Jorge
La derrota, es el tiempo de la revancha, tanto como la victoria es el tiempo del desgaste.
El reloj del universo, no se detiene en la victoria de las doce, ni en la derrota del seis.
Un abrazo, en todas las horas.
Esteban
Abrazo de esfera horaria, Esteban !!!
Gracias por pasar por mis letras
Que bueno todo, verso y comentario versado, eres un fenómeno.
Un abrazo.
Gracias, María.
En este caso, el comentario es el protagonista.
Una abraçada afectuós
Ya, pero tu lo encumbraste.
Un petonet
resiliencia hasta los poros, es un gusto deleitar buenas letras. me identifico con ellas, un calido saludo
Un placer que pases por mis letras. Y una enorme satisfacción el haber podido interpretarte
Un abrazo
Me alentaste la resiliencia de mi sangre poemaria:
Y yo escribía.
Y yo escribía y escribía y escribía.
Y cuanto más me ahogaba de dolor.
Escribía y escribía y escribía
y volvía a insistir el escribir más todavía.
Y nada podía violar mi sumergida poesía e insistía porfía.
Nunca jamás de los jamases rendición que estrangulaba,
me desfallecí dejada de la mano de Adiós
de escribir la palabra escrita.
Repetir rebelión rebeldía revolución
de la escritura reiterada autora.
Como buena escritora congénita del sol latente escribiente
y por dest-ello superviviente.
Que te escribe que te escribirás
hasta el escrito infinito del escribir consecuente.
Y escribí escribo y escribiré porque vencerlo me renació
escritura a la poesía valiente.
Siento una mezcla de honor, de placer, de inmerecida satisfacción, de mágica sorpresa, de destino de bendición errática, por haber servido de disparador y de envase de tan hermosas palabras.
Tres reverencias para usted, mi dama. Sienta, de aquí en más, que mi corazón es su casa.
Hermoso poema !
Sobre el final, me parece un excelente remate.
Un abrazo
Ese remate salió de la galera. Creo que sin esa estrofa el poema no valdría nada.
Abrazo amigo
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