LA CREDULA II

Anastasia cuando tomó la decisión de llamarlo lo hizo con precisión pero no calculó sus palabras, se dejó llevar por el impulso que le habían arrebatado lo que le había dicho él, de que no sentía más como antes.

Cuando Tom del otro lado del teléfono, le dijo que no podía hablar en ese momento, que la llamaría más tarde cuando se desocupara.

Cobarde, se dijo a sí misma, mientras maldecía cada uno de sus mentiras, como aquella vez que la despertó con un ramo de rosas, y le dijo que no podía vivir sin ella.

Asimismo había conocido a su familia había compartido fiestas tradicionales, también una hipocresía más,se había introducido en su familia en sus amigos y ahora con sus manos vacías de amor, de tantos recuerdos, fotos que estaban en cada uno de sus lugares cotidianos...

Dificílmente se repondría sola de esto, sus amigas no estaban para escuchar sus desbordes o lloriqueos.

Volvió a su casa respiró hondo hizo un par de meditaciones y y ya se dijo así misma -mañana será otro día, al que le voy a llenar de colores y mucha música y olvidarme de que alguna vez compartí algo con un ser tan mentiroso como Tom.

Se preguntaba una mil y veces que necesidad de ir tan lejos con tantos engaños, e ilusionarla con un futuro juntos , cuando en realidad había sido para él alguien totalmente descartable de la noche a la mañana .

Se dio ánimos nuevamente ,se dio un baño de sales para relajarse puso su música preferida y poco a poco entre las burbujas y la tibieza del agua se fue a la cama y sin lamentarse de su mala suerte se relajó hasta que la atrapó el sueño , allí se desprendía con una infinidad de luz ,como un ser hermoso que si lo era y valiente que recorría un prado dorado de espigas, con la que calentaba a su personita, con la bebida tibia de leche y miel , su dulzura era infinita y sus memorias recorrían el valle de las mujeres que siguen adelante....