Amada mía...
Te he dedicado los colores de la verdad y las caricias de la felicidad.
Pero no bastan.
No hay manera de complacerte.
He probado de todo para provocar una sonrisa en tu rostro y no veo brillo en tus ojos al despertar.
Sé, después de todo... Que no soy tu amado, amada mía.
Sufro de deseos y realidades crudas.
¿Qué soy ahora?
Sólo soy un hombre mendigo de amor,
que espera a su dulce amada en el mismo lugar en donde ella lo dejó.
- Autor: Dym (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de abril de 2018 a las 01:04
- Comentario del autor sobre el poema: Hacía tiempo que no publicaba. Dejo a este pequeñín. Un poco triste, por cierto.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: Ӈιρριε Ʋყє ☮
Comentarios2
De nuevo vez... el que escribe es masculino de nuevo de una edad menor como la tuya... Creo que debes escribir lo que tu sientes y no te ofendas por la apreciación...
Me gusta escribir como hombre. Me gusta pensar diferente.
yo a veces escribo cosas... que solo una mujer entiende
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