Emilia estaba sola
en esa pieza
antigua, enorme
de infinito piso de maderas finas.
Había perdido todo
su amante
se fue por la puerta
prometiendo no volver.
Tanta pena
dolor y fracaso
lo quiso borrar
de mil maneras
hasta que decidió
pintar
esa puerta maldita
por donde nunca regresaría.
Pinto el mar
un horizonte
y gaviotas regresando
sin necesidad de amar
...………..
el mar
de a poco
iba cubriendo
las finas maderas del piso.
Dicen los vecinos
alertados por el agua
que filtraba desde
arriba
que no la encontraron
solo un rastro de pisadas
entre las arenas
pintadas
al borde
de ese mar
por donde había escapado.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de abril de 2018 a las 12:10
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 16
- Usuarios favoritos de este poema: larisadelesqueleto, Texi, Ӈιρριε Ʋყє ☮
Comentarios5
"y gaviotas regresando
sin necesidad de amar"
estos dos versos, que creo cosen el argumento del poema, me han gustado especialmente
necesidad de escapar de un mundo
prosaico y sucio
un abrazo
Cuando el alma modifica los elementos trastocando el universo real, en solo un deseo..., una huída.
Gracias por tu comentario.
Esteban
Me gusto, a pesar de la idea de escapar de la realidad, a través de un cuadro. Para mí, no es nueva, una vez yo escribí un relato de cien palabras y el pintor era el que escapaba, a través de su obra.
Abrazos
Toda creación artística, es un escape de la realidad. También el observador de la obra, puede de alguna manera, escapar a ese universo distinto, que se abre ante sí.
Un abrazo.
Esteban
Lindo cuento poeta, un abrazo
Gracias Tokki, por tus palabras.
Un abrazo.
Esteban
Hay puertas que conducen a la nada, y puertas que conducen a todo.
Este poema es una puerta.
Abrazo grande, amigo
"Hay en ese pasillo, muchas puertas iguales, debo trasponerlas a todas..., pero sé que una es la de la locura."
Un abrazo agradecido.
Esteban
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