A que sabe la vida cuando el dolor marca los días...
quizás a aroma lastimero,
quizás a arena que raspa y deja huella,
o quizás a sabor del agua del mar.
A que sabe cuando incautas el miedo y juntas los dos,
saben amargo como el naranjo agrio,
como la centaura menor o el trébol acuático,
notas, como en las noches de soledad,
trepan por la garganta
y como costras de silencio,
asfixian, matan, resucitan.
Siento como galopan,
las herraduras del tiempo,
sobre mi vida amarga.
Quiero morirme en el viento,
disolvérme en la lluvia,
quiero no existir.
Que el aura del desapégo
rodee a mi Ser abstracto,
quiero volar hacìa el cielo
y ser quemado en el Sol.
No sentir tanto amargor,
tanta soledad,
quiero que mi vida pesada,
no sufra de esta manera tan profunda.
Y que hoy más que nunca,
la soledad, la tristeza,
la muerte de mis sueños
y la muerte de mis esperanzas,
terminen arrebatándome el tiempo.
P.M. Pedro Monroy Gemio
- Autor: Pedro Monroy Gemio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de mayo de 2018 a las 06:23
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 31
Comentarios1
Hermoso poema, aunque nostálgico.
A veces la vida nos sabe demasiado a tristeza...pero siempre existe la esperanza de un nuevo amanecer, amigo Monroy Gemio Pedro.
Gracias Rossi
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