La mano intrusa hizo acto de presencia y recorrió tu piel, aquella que erice alguna vez con tanto amor y vehemencia placentera, logró surcar cada curvatura de tu cuerpo perfectamente tallado y poco a poco caminó dentro de ti, oh damisela de labios de fresa con sabor a Kiwi, a pesar de esto es imposible arrancar de mis labios el sabor de tu boca y mucho menos el dulce sabor de tu humedad. Como reo obediente doy fiel cumplimiento a la condena perpetua de amarte de soslayo, disfrutarte en la distancia, apreciarte en cada reflejo de luna llena y poseerte en mis pensamientos sin obstáculos, disfrutar de ti hasta la mas mínima expresión de tu ser. La mano intrusa hizo acto de presencia, y recorrió de cerca tu piel, mas yo, seguiré atado a tu recuerdo de mujer, hermosamente perpetua, aunque ya la mano intrusa anduvo cerca.
- Autor: jose miguel pichardo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de mayo de 2018 a las 15:57
- Categoría: Amor
- Lecturas: 12
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