En el alba del exilio
hubo volcanes de odio
rocas dieron razón
de la institución,
de las banderas
y de la flor.
Con un café y rosas
el sol inició
una ronda que
cristalizó en el ocaso
En el alba del exilio
hubo volcanes de odio
rocas dieron razón
de la institución,
de las banderas
y de la flor.
Con un café y rosas
el sol inició
una ronda que
cristalizó en el ocaso
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