Tus labios besan la sombra de mi noche,
oculta entre palabras y alegrías.
Luego, tus manos dibujan un paisaje...
para dejarme un Rembrandt que palpita.
Tus labios besan la sombra de mi noche,
oculta entre palabras y alegrías.
Luego, tus manos dibujan un paisaje...
para dejarme un Rembrandt que palpita.
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