LA ROSA QUE SANGRA
PISOTEASTE LA ROSA
DESDE TU PECHO ATREVIDO,
Y MARCHITASTE AMAPOLAS
DE NUESTRO AMOR MAS QUERIDO.
EL MAR YA NO TIENE ONDAS
NI EL VIENTO TIENE SILBIDOS,
Y LA NOCHE MUERE SOLA
Y A MI ME LLAMAN OLVIDO.
TAMBIÉN ME LLAMAN LA GLORIA;
PUES PASEN LOS DOS A DENTRO
Y ME CUENTEN SUS HISTORIAS;
LA HISTORIA DICE QUE HUYA
DE TODO AQUEL QUE TRAICIONA,
EL MÁS SUBLIMADO AMOR
QUE SE MERECE LA LA ROSA,
DE AQUEL AMOR MÁS QUERIDO
QUE LO ENTIERRAN EN LA FOSA,
PORQUE NO VEN CIELOS CLAROS
EN LOS CAMPOS DE LA HIPÓCRITA.
POR ESO MANDAN HUIR
DE LOS QUE PISAN LA ROSA,
Y TE INYECTAN AMENAZAS
PARA MORIR EN LA SOMBRA,
POR ESO YO QUIERO HUIR
DE LOS QUE PISAN LA ROSA,
Y AQUEL AMOR MÁS PROFUNDO
QUE TANTO AMAS Y ADORAS.
Y AL NO VER SUS CLAROS CIELOS
TE MANDAN PARA LA HORCA,
Y UN POETA LO QUE ASPIRA
ES VIVIR CUAL MARIPOSA,
Y COMO LAS MARAVILLAS,
Y COMO LAS AMAPOLAS,
PERO NUNCA MARCHITAR
NI PISOTEAR A UNA ROSA.
- Autor: Fco. de Sotavento. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de mayo de 2018 a las 06:17
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 88
- Usuarios favoritos de este poema: Juan Senda, Hugo Emilio Ocanto
Comentarios1
Excelentes son tus letras, poeta.
Mi felicitación.
Mi saludo, mi amistad.
Hugo Emilio.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.