En la insondable escalera.
Suben y bajan los sueños.
Como peldaño a peldaño,
van alcanzando la meta.
Imprecisa y transparente,
como el aire entre las tejas.
Escalones que se hunden,
en los pozos más oscuros.
En las simas más siniestras.
O se elevan como torres,
desafiando a las estrellas.
Y así, escalón a escalón.
Va caminando la vida.
En la hojarasca perdida,
buscando su condición.
Mientras algunos sucumben,
o emergen al exterior.
En una mano la antorcha,
que el récord busca alcanzar.
En la otra las promesas,
que entre los dedos se van.
En un escalón deseos,
que buscan felicidad.
En otro las realidades,
que te azotan sin piedad.
Largo sendero de nubes.
Grises regueros de sombras.
Esplendorosas verdades,
que iluminan la modorra.
Zarandeos que despiertan,
rutinarias realidades.
Rincones que se alimentan,
con la fuerza de la sangre.
Infinitas las praderas.
De sueños y realidades.
Germinando las locuras,
que sazonan las verdades.
Noches sin Luna de gozos.
Salpicadas de caminos.
Sin saber cual elegir,
para alcanzar el destino.
Infinitas escaleras.
Que cruzándose doblegan,
al cansado caminante.
En su caminar constante,
buscando el mejor camino.
Esa insondable escalera.
Que a veces cruza fronteras.
Y otras veces las eleva.
Pero que siempre se anhela,
llegar indemne al final.
A. L.
http://alupego.blogspot.es/2
- Autor: alupego (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de mayo de 2018 a las 07:08
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 56
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