Caminando siempre al infinito…
Una simple mirada al horizonte
sin intención de finales
hará variar los límites
sin ponerle límites a nada
y a nadie
solo siguiendo la pisada
de lo imposible
para hacerlo posible
y lograr el horizonte,
ese que se soñó tan lejos
tan desafiante
- inalcanzable…
El pequeño tiempo se suma
y se hace tiempo,
el instante se agrega
y se hace momento,
la semilla se siembra
y se hace planta,
el grano de arena se junta… reúne
y se hace playa
que se eleva y escala…
se hermana y se hace duna.
La mirada se aleja… se alarga
y desde lo alto de la duna
el horizonte se agranda,
se profundiza y ya no se alcanza
- la inmensidad se hace infinita.
Es el desafío de los sueños
para emprender los vuelos
los de inicios de germen, de raíces
y semillas desafiadas,
conmovidas, disponibles
para ir en búsqueda de las dunas
que cada uno va formando
para ampliar su mirada
en aventura de horizontes más lejanos
brizna a brizna, gota a gota
hasta llenar el vaso de la vida
para que derrame…contenidos
que serán reales o irreales.
Comentarios2
Un poema con movimiento y un reconocimiento a la constante creación.
Siempre caminando hacia el infinito, pienso como tu querido amigo.
Un gran abrazo
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