Lo confieso

LO CONFIESO.

Me he sentido inferior en ocasiones, he echado un vistazo al interior del pantalón a ver si tengo cojones.

Me he sentido demasiado irritado y he tenido que callar, esto de nada me ha servido, todo se ha acumulado y ha llegado al punto del extremo y he tenido que estallar, eso me ha llevado a provocar mucho daño, incluso ya me veo como un extraño y extraño tantos momentos, no me  resigno a que estén muertos.

Y lo confieso, beso a mi hijo y siento un sentimiento indescriptible, lo despido y por nada me quebranto, hay situaciones que no afronto. Que tonto! Sólo me lamento, hay algo muy jodido en mi mente que mi actitud es deprimente, hay algo muy podrido en mi alma porque alejo a quien me ama y del suelo no se eleva mi autoestima.

Lo confieso, me quiso y quise quererla, jamás ofenderla pero la hice pedazos, hubo calor en sus besos y abrazos pero yo era un iglú.

Lo confieso, a veces pienso: Soy una mierda, pero debo ser peor que eso, ya que ni una mosca se me acerca.

Lo confieso, estoy tenso y lo expreso con claridad, siento un temor aberrante por la muerte y  la realidad en general. 

Confieso que con mucha frecuencia me he sentido al borde de la demencia, que he sido preso de la apariencia y estoy en un proceso de liberación, confieso que he estado a un paso de la rendición.

Que me frustro porque no supero cosas que pasaron hace más de un lustro.

Confieso que a pesar de lo antes dicho, no habrá hecho que me haga declinar.

Israel Najera.   21-06-17.    Cd. Jiménez Chihuahua.