No nos están preparadas caídas ni trampas, y no hay
nada que nos deba dar miedo ni atormentar.Estamos
puestos en la vida, como el elemento a que somos
afines, y hemos llegado a ser, por una milenaria acomodación,
tan semejantes a esta vida que, cuando nos estamos quietos,
apenas se nos distingue de lo que nos rodea, por un feliz
mimetismo. No tenemos ninguna razón para desconfiar de
nuestro mundo, pues no está contra nosotros.
Si nuestra vida nos aconseja mantenernos siempre en lo
difícil, entonces lo que ahora se nos aparece todavía como
lo más extraño, se convertirá en lo más familiar y fiel
a nosotros.
- Autor: emiliodom ( Offline)
- Publicado: 4 de junio de 2018 a las 03:06
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: Hugo Emilio Ocanto
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.