Infancia dormida
que guardo en fotografías.
Ya mis niños no están.
Solía llevarlos al estanque
donde se posan las aves
y el sol ostenta su brillo
sobre aguas de fuego.
Allí mecían su barquito,
aquel que papá les construyó
con manos de amor.
Corría el verano de 1,979.
Mis dos varoncitos
prolijamente vestidos,
se asomaban a las aguas
verde azuladas
a iniciar la competencia
con otros niños.
¿Qué fue de aquel tiempo?
Se esfumó en el ayer;
hoy mi casa la llena el silencio.
Ya no escucho el correteo
de mis hijos
por el largo pasadizo
de gastadas losetas.
Ya les crecieron alas a mis niños
y volaron por la ruta
que les señaló el destino.
Y hoy al limpiar las gavetas
esta foto en blanco y negro
casi olvidada
remeció mi vida quieta,
tejiendo recuerdos
que yo creía muertos.
Ingrid Zetterberg
(Inspirado en la imagen)
De mi poemario: "Inspiraciones de mi nostalgia)
Derechos reservados
Safe Creative Cta. Nro. 1006080193112
- Autor: Ingrid Zetterberg B. ( Offline)
- Publicado: 4 de junio de 2018 a las 03:44
- Categoría: Triste
- Lecturas: 34
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, Hugo Emilio Ocanto, María C.
Comentarios3
Preciosas nostalgias de un tiempo hermoso de tu vida!
Vale recordarlas si ello te brinda un bello momento que se puede volver a revivir con agrado!!
Magnífico poema, muy tierno y sentido!
Felicitaciones y un cálido abrazo!!!
Gracias estimado Jorge por asomarte a mis versos y dejarme tan linda respuesta. Un abrazo con mi afecto.
Espléndido poema, Ingrid!!
Felicitaciones.
Gracias por compartir.
Saludos.
Hugo Emilio.
Gracias Hugo Emilio por recorrer mis versos y apreciarlos. Un saludo cordial.
Hermosa semblanza, esa mano invisible que te devuelve bellos recuerdos.
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