Por Silence Dogood
Antiguos espíritus del Ande dadme fuerza!
Mi carga es pesada y mis energías pocas.
Temo ser llevado al eterno olvido.
Y no vivir en la gloria de la cumbre eterna!
Dioses de tiempos arcaicos, héroes andinos.
Escuchadme! Mi plañir es la viva agonía.
Mi cantar se apaga y caigo como ave herida.
Dadme vida, mi alma esta sedienta!
A tiempos remotos yo anhelo volver!
De está lacónica vida quiero escapar!
Allá a lo lejos la cumbre escalar!
Del Hommo Faber quiero escapar!
Más soy la cúspide y la cordillera!
Soy hijo de la montaña!
Fuerza y epopeya de piedra!
Soy hijo del Ande, fuerza eterna!
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- Autor: Silence Dogood (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de mayo de 2009 a las 13:18
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 32
Comentarios3
Que no es poco, ser hijo del ande,,,muy bonito tu poema, y si escalas la cumbre entonces estas lleno de vida,,,saludos
Bello poema con su estilo muy peculiar. Siento la pesadez de una vida densa y sufrida, manifiesta en tus versos. Buscando alivios. Al niño que llevas dentro, debe ser escuchado. La poesía es un buen canal de liberación. Cálidos saludos de luz
Es más bien un canto a mi tierra, lo sufrido, pues no se refiere a mi. Aunque leyendolo varias veces me doy cuenta que pareceria un lamento personal, pero aclaro que no lo es. Y más que niño interno, es el hombre joven que dasafia la inercia, la incultura, el conformismo. Que busca en el mito del pasado el orgullo del hombre con sed de gloria, alguin que desea perdurar como las montañas.
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