la vida se deja de vivir sin que nos demos cuenta, que sólo pasa sin dejar huella
en la tranquilidad de la medianoche conversamos,
es que nos vimos atrapados en una falta de prisa por devorarnos,
las palabras fluyen como nunca antes, no recuerdo escucharte así, como quizás nunca antes lo hice,
hoy he conocido mucho de ti...
de ese largo y sinuoso camino
que un día andamos tú y yo,
hoy sólo queda una vía corta,
una súper carretera que deja poco a la imaginación, a los sueños,
ahora la vida se vive tan deprisa que ya no nos deja una estela de recuerdos, de almas entrelazadas
así es como me escandalizaba imaginar al viento rozando tus trigales dorados y húmedos,
el vibrar de los hilos dorados tensados entre tú y yo... sentir,
como fuimos construyendo
todo eso que llamabamos amor
la luna es Luna, el sol es sol,
el agua todavía baja cristalina
por el río para refrescar los sueños,
de dos que jugaba a quererse,
no es que hayan cambiado las cosas, cómo si han cambiado las sombras que habian a nuestro alrededor separandonos
hoy solo se miran ciudades
dónde interminables campos
de color lavanda existían
hay una nueva avenida
qué ha roto para siempre
el encanto de la intimidad
de ese rincon donde...
nos conocimos en el amor
cosas que no importan ya,
ha llegado el alba,
y me descubro mirando
arrugas nuevas en tus manos,
el tinte entre tus rizos castaños,
pero nada me asombra,
sólo que ha pasado la noche
y no te he querido besar
Y me di cuenta
que fue consumido,
lo que debió haber sido consumado.
a las orillas de un espejo
miró unas fotos... son tan ajenas,
al través del espejo quisiera sentir el viento acariciar esos trigales dorados, pero estos ya no brillan,
han perdido su natural humedad, pero aun quieren arder hasta consumirse con el último rayo de sol
Fueron tus ojos que me dieron,
el tema dulce de mi canción,
la recuerdas? una vez te la canté Bajo la luna de abril?
y observo esos ojos miel intenso,
que alguna vez a mi alma llenarán de inspiración sediente...
miro ahora, me miran diferente,
y tu ahora dices que fue por mí
que no pudo ser, lo que tu no dejaste ser
Ganado tengo el pan... hágase el verso!!
En los ecos del mar,
el viento soplaba tan fuerte,
que sentí la soledad,
y se vino a escuchar el silencio,
tú estabas tan cerca de la esperanza.
siempre a final de mi camino
esperando mi pronto llegar…
Flabio Marti and bad co.
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CDMX México
- Autor: Flabio Marti (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 12 de junio de 2018 a las 15:13
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 23
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