Caminaré solitario las alamedas,
donde mis pasos de infante forjaste,
para escuchar el susurro del viento,
que armonioso silba tu nombre.
Mis ojos han llorado tu partida,
mi corazón expira de nostalgia,
mi alma evoca tu sueño infinito
y mi vida vuela junto a tu recuerdo.
Mis pensamientos vuelan como gaviotas,
para remontar el mar de tu remenbranza.
Mis sueños son plácidos y profundos,
al escuchar la canción que entonabas en mi cuna.
Madre:
Mujer de fructífera entraña,
han florecido tus raíces
en esta existencia que llenaste de primavera.
En tu día
quiero que estas estrofas
se tornen en coronas de siemprevivas
para que adornen tu eterna morada
y mi plegaria de amor por Tí.
Dios te bendiga Mujer,
encontrar la senda del éxodo de la vida,
para llegar al santuario de tu alma,
y llevar a tu mansión de serena evocación celeste,
estas flores, ofrenda de mi corazón.
Madre ausente
que la estrella de tu presencia y bendición
brille siempre en mi camino.
Jaime García Alvarez
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Autor:
Francisco Caleros de la Roca (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 8 de mayo de 2009 a las 15:09
- Comentario del autor sobre el poema: recuerdo a la Mujer más bella que las flores en esta fecha especial de las Madres del mundo.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 3411
Offline)
Comentarios4
Me ha gustado el detalle de escribir la palabra Madre con mayúscula inicial. Con este poema y con ese gesto muestras cuán importante es para ti, aunque ya no esté sino en tu recuerdo. Dos observaciones: "silba" y "fructífera".
Saludos, Jaime.
Hermoso, amigo un poema homenaje muy bonito y digno. Un abrazo, gracias por compartirlo. Ruben.
Leí esta poesía con lágrimas , el 16 de mayo mi madre cumpliría 84 años, de no habernos dejado hace 2 meses . Preciosa , se la dedico a ella y se la leí con mucha extrañeza por si me escucha.
Un saludo .............Pepita
¡SIMPLEMENTE HERMOSO!
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