Directo y sin orgullo

Trato de sentirme bien cuando intento  tener orgullo,

¿Pero que es  orgullo para mi , si te quiero mas que a mi mismo

y cada sonido que sale de tu boca mientras te amo, es una melodía de paz para mi alma?

Pero mi orgullo no juega limpio, pone trampas en los bordes de mi instinto,

y cada vez que lo descubro se acobarda y se refugia en el cariño que un día sembraste

y dejaste a medio cosechar.

Otra vez como idiota, escribiendo, pensando, queriendo, amando.

Marchitándome de a poco, defraudando al sentido, que me aburro de mi mismo,

viendo como lo único que hago es alejarte aun más con mis palabras.

Incertidumbre de no saber que es peor,  si el estar solo en con el mundo que me regalaste, o acelerar tu partida con mi pena y poesía sin escape, deprimida.

Mi pena compañera, que te entiende, que me entiende que se extiende…

Pena por que te estas desvaneciendo, alargando la distancia sin camino claro ni seguro...talvez ni real.

La pena de mis ojos que ven el futuro con tu ausencia, mi pena presente  hija de nuestra pena pasada que vive en tu conciente inconciente, pena por  mi inconciente ciego,   avaro y sin orgullo.

Descontrol que lo controla todo….quiero que me ames ¡…no hay justicia mas dulce que   venganza improvisada , mi pena amor ¡ mi pena por  tu justicia merecida.

El ansia de construir la paz dentro de tu caos que no explota que me ama pero con orgullo, el que vivas y el vivir  yo con mi pena merecida que no cede ni cesa.

No tengo mis manos, menos herramientas, y los tiempos se van conociendo, haciendo amigos, menos duele, menos pesa, menos se acercan, menos valgo, menos me penas.

Me pregunto: ¿llega algo a ti? , como llega.

Si estuvieras aquí dentro, en mis ojos ver por ellos, lo que veo, sentir juntos como lo puro de antes, antes de ser dos, después de ser uno.    

Estoy desnudo y sin defensa, sin ganas de futuro incierto, me gaste el alma contigo, contigo y mi orgullo. Entonces que me queda?  Que me vale entonces si en  mi orgullo ya no valgo? …donde esta mi refugio?  Mi permiso de acercarme en la palabra y en el hecho,

La pena de mi pecho, de mi lecho que te cargan…fundida, incrustada.