Aquel amor fue savia
y coincidencia,
esperma de mayo
polinizando verbos,
agua fresca
desbordando las manos,
exaltando el pecho
en redobles secos,
un corte transversal,
en medio de una hoguera
de presentimientos;
fue un abrirse en dos
la mirada,
y hallar en medio
del silencio,
la voz de la carne
vociferando el sexo.
Eduardo A. Bello Martinez
Copyright © 2018
- Autor: A. Martinez ( Offline)
- Publicado: 19 de junio de 2018 a las 15:05
- Categoría: Amor
- Lecturas: 60
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.