El Leñador

Perozo rivero Miguel Oswaldo

Erase un avaro Leñador que en el verano cortaba toda la leña del bosque, la almacenaba y esperaba el invierno.  Con la llegada de las primeras lluvias, “Pocavista”, así llamado porque le faltaba uno de sus ojos, aumentaba en 10 veces el valor de los atados. Al cabo de los años aquel usurero Leñador  llegó a ser el hombre más rico y despreciado de la Aldea. Esta es la historia narrada ahora en animadas tertulias pueblerinas:

Cierta vez, en la alta  montaña, donde el trino de las aves se confunde con el murmullo de  manantiales y riachuelos que van  aguas abajo, ocultándose bajo la sombra de los árboles, entre  el verdor de los helechos y gruesas raíces que como brazos de gigantes se anudan a las  rocas,  un viejo Leñador, mal encarado  y avaro, sintióse de súbito atemorizado,  cuando una voz venida de muy lejos, susurrábale  palabras a su paso.

Con el correr de las horas el temor de el Leñador fue creciendo, pues esa voz lánguida  y extraña, llegada con el viento, salida de las piedras, de la hojarasca y las flores marchitas, proseguía acompañándole en la marcha de su penoso ascenso por el camino estrecho de abismos y cuestas empinadas. Más fuerte que el temor, la  ambición empujaba el hombre  de colérico semblante sudoroso y torvo.  Con el acero cortante de su hacha y la fuerza de sus manos, endurecidas y callosas,  el Leñador, implacable y brutal, cortaba, árboles…, árboles…, y  árboles…. Las cosas a su alrededor eran tristes, muy tristes, y el aire se impregnaba con el olor vegetal de la madera, con la tibia aroma de  hojas y geranios mustios, abrasados por el sol de la mitad del día.

Ya con los árboles tendidos a sus pies como  ángeles muertos y desnudos, el Leñador  desenfundaba de su vaina el machete relumbroso que nunca le faltó en el cinto, y con movimientos rápidos de un felino hambriento, hacía trizas las ramas con las que el tronco despedazado había vestido su cuerpo, sabrá Dios por cuántos años. Pero ahí estaba la voz misteriosa y lánguida llegada con el viento:

-¿Leñador, qué haces?  Mas  el viejo y avaro Leñador, entregado a su faena, loco por la avaricia, ciego por la usura, prefería no escuchar. Tensos los músculos  barnizados de sudor, descargaba con fuerza su filosa hacha sobre el tronco del árbol; una y otra vez el golpe sobre el grueso madero…

¿Leñador, Qué haces? La voz  regresaba, salida de las piedras, confundida con el croar de las ranas, el rumor leve de las aguas en los espejos del riachuelo, o el crujir de los ramajes desgarrados. Las manos del el Leñador  van y vienen en el aire. El hacha es una saeta que va dejando en la corteza del árbol la huella implacable de su filo…

¿Qué haces, Leñador? Sintió sed el Leñador y fue hasta el arrollo cristalino, allí bebió agua fresca y abundante hasta saciarse, después volvió sobre sus pasos, tomó de nuevo el hacha entre sus manos que no cesó ya de blandir hasta mirar caer frente a sus ojos el frondoso  árbol de tupido follaje.

¿Qué haces, Leñador? Sintió el Leñador que el sol quemaba sus espaldas y fue a guarecerse bajo un Samán de esplendorosas ramas. Exhausto y fatigado, no había comenzado la dicha del descanso cuando escuchó de nuevo la extraña voz inquisitiva: Leñador, ¿qué haces? Y contestó el Leñador: ¡Estúpido de ti que así me enojas, ¿no ves caso que estoy haciendo leña? Respóndeme tú,  ¿qué es lo que haces importunándome mi tiempo?

-Yo soy, respondió la voz desde lo lejos, quien hace la fuente cristalina de agua fresca, yo soy quien pone sobre el alto tronco el verde follaje de los árboles. Mi aliento es la brisa que llega hasta tu piel a oxigenarla…

 

  • Autor: miosperi (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 12 de junio de 2010 a las 04:16
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 70
  • Usuarios favoritos de este poema: Libra *M*, florsilvestre, Elo, rosi12
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Comentarios8

  • Libra *M*

    Muy bueno tu relato, de él podemos sacar una gran enseñanza. El egoísmo del ser humano no nos deja ver alrededor; nos marcamos una metas sin importar lo que vamos avasallando y destruyendo a nuestro paso. Esperemos que un día no tengamos que lamentar, como ese leñador, la falta de oxigeno en nuestro planeta y que para entonces sea ya demasiado tarde.

    Petonets,

    Libra *M*

    • Perozo rivero Miguel Oswaldo

      Gracias Libra. Tu comentario es mejor que el Relato y de eso se trata. En realidad no hay allí pretensión literaria algunan. la Idea es poder frecuentar el tema en la opinión pública, como ejercicio de conciencia por la Ecología y el Medio Ambiente. Muchas excusas le debemos a nuestros compañeros de Página, a la Dirección, y a la selecta audiencia de POEMAS DEL ALMA por el atrevimiento. Para ellos nuestra gratitud por ser tan generosos y de verdad Libra, saludo esas palabras con la alegria de saber que existen seres tan especilaes como tú....

    • la negra rodriguez

      EN EFECTO , VAMOS CIEGOS POR EL MUNDO POR EL DESEO D TENER MASY MAS, Y NO VEMOS QUE ARRASAMOS CON TODO , HASTA CON NUESTRA PROPIA EXISTENCIA.
      MUY BUEN RELATO.
      BESOS

      • Perozo rivero Miguel Oswaldo

        Será mayor la esperanza mientras hayan recepciones de gran sensibilidad como las tuyas para este tipo de mensajes. El relato es accesorio, lo que importa es la respuesta y has dado en la Diana. Tu reflexión es sabia, de gran valor, tanto más cuando circula en un medio como Poemas de Alma, donde pensar, sentir y crear son tareas de la excelencia. Eres un Ser maravilloso, te recuerdo siempre. Un Abrazo....

      • nellycastell

        Muy reflexivo tu poema querido amigo, un abrazo en la distancia.

      • florsilvestre

        QUE HERMOSO POEMA MI AMIGO HERMOSOS VERSOS
        FELICITACIONES
        UN ABRAZO

        • Perozo rivero Miguel Oswaldo

          Mi estima Flor: Me sorprende la prontitud con la que Usted nos captura. Es la evidencia de su constancia e interés por estas manifestaciones del espíritu, que en el fondo son un compartir, en premio de lo cual recibiimos estas gratas recompensas que, como las suyas, siempre tan generosas, nos llenan de aliento. Un saludo cariñoso....

        • poetadelmar

          Estuve a punto de dejar esta pagina provocado por cosas de mal gusto, poesía que no lo es, arteros plagios al intelecto del pueblo y de los compañeros que aquí escriben, comentaste un poema que es muy dado a encontrar en los retretes públicos de todo México, adivine de inmediato el talento de tu pluma, y entonces te busco con sin igual curiosidad, me encuentro ante un cuanto brillantemente escrito, un cuento de fabula como en los tiempos de María Castaña, como los cuentos de aquel juglarón que trae en su costal diez mil historias de príncipes, bellas damas, mostros de diez mil cabezas y fantasmas andariegos.
          Hoy eres la brisa que cubre y embalsama la poesía, la literatura. Gracias mil hermano mio.

          • Perozo rivero Miguel Oswaldo

            Mi pobre corazón fatigado por la generosidad de tu elogio se ha quedado sin respuesta. De verdad me siento abrumado y movido por la pena, porque no creo que este a la altura de merecer tanto por tan pocos méritos, pero si me permites te rogaría que no te alejes de la Página. Pienso que personas con un sentido muy centrado de este oficio, pueden contribuir a enaltecer el medio, que a mi en lo particular me parece una brillante inciativa, por lo demás soy de los que creen que la Poesía, conceptualmente bien entendida, es el más hermoso legado de la cultura humana. Preservarla en el sitial de dignidad con el que nos la legaron nuestros antecesores es un deber sagrado.Te envio un calido abrazo y el compromiso de mi invariable afecto....

          • Elo

            Mi querido Oswaldo, tu poema es muy hermoso, en un interesante relato muy bien logrado, que me ha encantado...Me gustó pasar por tu rinconcito, me lo llevo a mis favoritos...

            Felicitaciones...
            Un beso.

          • Perozo rivero Miguel Oswaldo

            Hola Elo: Te juro que no me perdono no haber respondido hasta ahora ese mensaje tan hermoso que le tributaste a mi relato. En este rinconcito tengo para la exquisitez de tu delicada sensibilidad humana, estas páginas amarillas de tiempo, de sol y de olvido. Con ellas y con esta rosa roja que te entrego desde mi corazón, le rindo homenaje de cariño a tu dulzura. Gracias Elo,. Un abrazo...

          • suroler

            Hola OSWALDO, por primera ves he leído tus sentires....me pareció hermosisimo, e implacable...ergo..LA NATURALEZA, EL TODO...EL UNIVERSO....(DIOS?) SIEMPRE NOS RECLAMA!!!!!!!!!!!!!!!!!!esperemos ser mas humanos y menos leñadores....despertando colectivamente frente a nuestras responsabilidades con lo que nos ha sido dado...
            un abrazo

            SUROLER /ALAS

            • Perozo rivero Miguel Oswaldo

              Gracias Suroler, me has conmovido de una viva esperanza y un nuevo aliento. Muy grato tu comentario. soy muy afortunado ´por este encuentro. Felicidades y un abrazo...

              • suroler

                gracias y un gran abrazo querido hermano, SEGUIREMOS RECORRIENDO ESTE CAMINO DE UNIÓN
                SUROLER/ALAS



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