A tres guajiros.
En la Guajira, el guajiro juega con la pelota de sol. Ahora, en la esquina del desierto de cemento y asfalto, ya la pelota de sol no está en el suelo para chutearla; se derrite en su cabeza y hombros, mientras persigue o espera la caravana de carros
para venderle sus productos asoleados:
tomates asoleados,
papel sanitario asoleados,
limones asoleados,
nísperos asoleados,
mangos asoleados,
mata moscas asoleados,
cambures asoleados,
caguiles asoleados.
Las redes de la igualdad lo empujaron hasta allí.
Levántate, que tú eres la primera sangre!
- Autor: Pablo Rilke. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de junio de 2018 a las 13:59
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 61
- Usuarios favoritos de este poema: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Comentarios2
¿Entenderá el guajiro lo que le toca vivir?
Saludos
El guajiro se encuentra en la misma situación que los Haitianos que viven en Rep. Dominicana: realizan los oficios más vulnerables y más incómodos en la sociedad. Gracias poeta Tokki.
Y ensueños asoleados poeta. Excelentes versos mis felicitaciones. Un cordial saludo.
Muy bueno tu comentario poeta Ma. Gloria Carreón Zapata, Gracias. Saludos.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.