Julio comenzó sin ti, los días fueron igual de bellos, las noches interminables, el paisaje impresionante como siempre...
Y pensé por un momento que habías sobrevivido a todo esto sin mí mientras mis lágrimas mojaban mis mejillas y comenzaba a convertirme en "La pobre mujer llorosa a media plaza", el viento fresco no secaba la humedad y la triste mujer no paraba de llorar... Levanté la mirada y las nubes dibujaban tu nombre en el cielo, todo era un recuerdo hermoso y doloroso al mismo tiempo.
La miseria me llevo a una respuesta sensata, se aclaraba mi mente y no pude evitar realizar que en realidad la que sobrevivía era yo, por que deliraba el perfecto atardecer sin ti, me mataba un abrazo romántico imaginario y la sangre se me espesaba de alegría mientras sobrevivía al deseo de verte a un costado haciéndome vivir.
Recorrí cada espacio con un nudo en la garganta y por supuesto en mis manos la esperanza se me escurria dejando el rastro de mis sueños contigo, y de mi amor moribundo.
Era yo ciertamente afortunada, en el universo de los miserables, caminando sola con el corazón roto de alegrías.
- Autor: Edith Azul (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de julio de 2018 a las 03:10
- Categoría: Triste
- Lecturas: 25
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