MI ANGEL DE LUZ

Mi Ángel De Luz

 

 

 

 

 

Capítulo 1

“EL ANGEL”

Desde el momento en que llego aquel extraño joven mi vida cambio para siempre. La forma en que llego y su procedencia aún siguen siendo un misterio para mí pero la paz que dejo en mi vida ha sido como una luz que desde ese momento ha iluminado toda mi vida.

Aquella tarde estaba parada en la acera frente al semáforo esperando para cruzar la calle. La verdad estaba muy distraída pensando en las tareas de la escuela y tal vez por esa distracción el cambio de luz me parecía eterno.

Solo fueron dos pasos adelante y un estruendoso ruido me ensordeció… Una brillante luz azul se apodero de mi entorno y el calor de unas extrañan manos rodearon mi cintura. De pronto sentí la sensación de estar flotando en un giro de 180 grados y despacio caer en el vacío.

No sé cuánto tiempo había pasado o si en realidad había perdido el conocimiento pero al abrir los ojos estaba acostada en la orilla de la calle y frente a mí un inmenso camión y varias personas murmurando y mirándome sorprendidas. Al voltear la cabeza y toda confusa, ahí estaba el… mirándome con aquella profunda mirada de unos ojos tan azules como la luz que momentos antes había rodeado mi entorno. Sobre su cuello colgaba una extraña cajita sostenida por un rustico collar de tela de seda. Sus manos eran suaves como la misma seda que sostenía aquel cofrecito. Aun no salía de mi asombro cuando él con una voz angelical me pregunto… ¿Estas bien? Creo que si le respondí, mientras instintivamente tocaba todo mi cuerpo como asegurándome de que estaba completo.

¿Tu quién eres le pregunte? “Soy Ángel” me respondió mientras acariciaba mis ojos con aquella mirada llena de una ternura celestial.

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Capítulo 2

CONFUNDIDA

 

No sé cuánto tiempo habría pasado desde el momento en que me ayudo a ponerme de pie… Solo lo miraba mientras más de una docena de curiosos me bombardeaban con preguntas que solo el respondía. Sentía en medio de la confusión como si aquel personaje me conociese desde toda la vida Y que sabía más de mil que yo misma. Pero lo más sorprendente aún estaba por llegar.

Con una increíble actitud de seguridad me tomo del hombro y me dijo “Ya vámonos Yanelis”… Asentí con la cabeza pero luego de unos pasos la realidad asomo por mi cabeza. Como es que sabía mi nombre? Como lo sabía si era la primera vez que lo veía y el a mi (Al menos eso pensé) me adentre en aquellos mágicos ojos azules como tratando de buscar una respuesta a mis dudas. Quise preguntar pero antes de que mis labios pronunciaran palabra el abrió la puerta y me invito a entrar. Como sabias que me gusta este sitio le pregunte… Solo me miro con una mirada tan dulce como esas que vienen del alma y sin darme una respuesta me invito a sentarme mientras halaba la silla.

Cuando por primera vez alcance a preguntarle de donde era llego la mesera con el menú… El tomo los dos menús y los devolvió a la mesera. La verdad que si tenía mucha hambre y casi pego un grito de angustia. Justo iba a abrir la boca cuando lo escuche decir… “Nugets con papas grandes y un fruit punch” … “También me trae 2 botellas de agua y unas papas medianas” Quieres algo más? Me pregunto… Pero no podía responder… Estaba muda! Atónita! No podía creer lo que estaba pasando! Eso precisamente era lo que yo quería y lo mismo que pido cuando vengo con mi familia a este sitio…

Ya comenzaba a pensar que todo era un sueño…Una de esas maldades inexplicables de Morfeo!

Si ese era el caso la verdad que no quería despertar… La solo presencia de Ángel me hacía sentir segura y todo mi ser se sentía abrigado de una paz inexplicable.

Aun a pesar de aquella tranquilidad que sentía y de esa sensación de felicidad que me envolvía , grandes preguntas comenzaban a cosquillear dentro de mí! Quién era? De donde era? Porque llego? Por qué seguía ahí aun después que todo había pasado.

Ahí seguía peleando con todas esas dudas que me tenían confundida

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Capítulo 3

AMOR DE PERRO

 

Mientras consumía mis nuggets y mis papas Ángel me hablo del accidente. Me dijo que aparentemente yo estaba distraída mirando el teléfono y camine unos pasos antes de que el semáforo cambiara… Que el conductor no tuvo tiempo para parar pero que por suerte él estaba detrás de mí y le dio tiempo a apartarme de la ruta de camión. Me conto como había tomado la información del conductor y del vehículo por si la necesitaba y me entrego los datos.

 

Una cosa que me tenía curiosa es que mientras conversábamos el solo tomaba agua muy despacio pero no comía. Solo me hablaba y cada una de sus palabras adornaban mi corazón como una de esas canciones sublimes que nos guían a la paz y al reposo.

 

Ya había terminado de comer así que lo mire como preguntándole “Y ahora que haremos?” Ángel me miro con sus ojos de cielo y me acerco sus papitas medianas diciéndome “Aquí está tu refill” Una vez más quede boquiabierta mientras él me miraba y sonreía (Lo del refill es algo que solo sabía mi Mamá y tal vez mi hermano pero nadie más. Ángel estaba haciendo añicos mi capacidad de sorpresa!

Aun yo con las papas en la mano y el con su botella de agua salimos del restaurant. Tengo que llevarte a tu casa me dijo… Ya es algo tarde y tu familia debe estar preocupada. Apenas caminamos media cuadra y él se acercó a un algo viejo vehículo al cual abrió la puerta sin llaves y me invito a entrar. A pesar de ser un automóvil algo viejo su interior era bonito, estaba inmaculadamente limpio y olía muy bien. Su consola carecía de lujos así que pensé “De aquí a mi casa nos vamos a azar con este calor infernal que hace”

Para mi sorpresa al cerrar las puertas un brisa celestial se apodero del interior de auto y junto que aquel aroma a primavera que sentí al entrar hiso del ambiente un paraíso.

El viaje fue corto y ya acercándonos a la casa sentí los ladridos de mi perro “Chombo” así que le dije a Ángel “Es mi perro… No te le acerques mucho porque a veces se pone difícil y te puede morder” Esta bien me dijo… Pero no me morderá me dijo muy seguro de sí.

Ya al bajarnos del carro ahí estaba en el balcón mi mama con una natural cara de angustia. Fui a pasarle la mano a chombo que saltaba de alegría! Detrás de mi Ángel observaba todo muy tranquilo.

Yo continúe adelante hacia donde estaba mi Mama para presentarle a Ángel y explicarle todo lo que había pasado. Al acercarme más noto la cara de incredulidad y sorpresa de mi madre mientras mira hacia donde está el perro, Asustada y llena de pánico volteo la cabeza ya ahí están … Chombo y Ángel jugando como dos niños que se encuentran después de una larga ausencia. Como dos amigos de toda la vida

Otra pregunta se apodero de mí y al parecer también de mi madre …

De donde salió este Amor de perro?

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Capítulo 4

UNA EXTRAÑA DESPEDIDA Y LOS LLANTOS DE CHOMBO

 

Ya comenzaba a caer la noche y los inusuales lamentos de Chombo despertaron mi curiosidad. Chombo es un perro inquieto pero normalmente no ladra demasiado y mucho menos se lamenta. Qué extraño suceso hacia que él se comportara de esa manera? No tenía una respuesta a esa pregunta pero no tardaría en tenerla.

Después de largas platicas dándole las infinitas explicaciones del accidente y respondiendo el consabido interrogatorio de las madres, había llegado la hora de partir.

Ángel se notaba un poco inquieto así que le pregunte…”Te sientes bien?” “Si …claro que si… Es solo que ya me tengo que ir… es un poco tarde para mi” Me respondió. “Pero si quieres regreso el lunes o paso por ti a la escuela” … “Esta bien” Le dije con más dudas que convicción.

Ángel se despidió cordialmente de mi madre y yo lo acompañe afuera mientras ella observaba desde el balcón.

Habrá unos 40 o 50 pasos desde el balcón de la casa hasta la salida a la calle y a medida que nos acercábamos a ella los lamentos y la inquietud de Chombo eran más notables. Ya cerca del portón de salida Ángel se acercó a Chombo quien de inmediato se abalanzó sobre él y trepo sus patas delanteras en su hombro. Ángel lo acaricio y le hablo… Nunca supe que le dijo pero aquellas palabras calmaron el lamento de Chombo.

Esa escena entre mi perro y Ángel de algún modo respondían a mi pregunta… Chombo lloraba porque sabía que Ángel se iría. Pero más preguntas se apoderaron de mi curiosidad… Como lo sabía? Porque lloraba su partida? Que unía a estos dos seres?

Ya afuera Ángel puso su mano sobre mi hombro y con la tierna mirada angelical de sus ajos azul de cielo me dijo…”Si me necesitas por aquí estaré … De todos modos te veo el Lunes”

Justo cuando Ángel cerraba la puerta de su auto para marcharse llego mi hermano Emmanuel que al parecer había visto la escena de Chombo y Ángel . Camino en silencio hasta donde estaba mi madre . Ahí permaneció callado hasta que me acerque. Me miro con cara de hermano celoso y escuetamente me hiso la pregunta a la que ni yo aún .tenía una respuesta…. ¿Y este loco quién es?

Los tres nos miramos como si todos supiéramos quien era pero nadie tuviese una respuesta. Mientras el único que parecía tenerla meneaba la cola mientras miraba en la dirección en que se había ido Ángel.

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Capítulo 5

UN VIAJE TORMENTOSO

 

Los lunes son complicados para todos y el tener que regresar a la escuela después del fin de semana también lo es para un estudiante. Pero este lunes me daba la impresión de que sería uno muy complicado.

Para comenzar nos despertamos un poco tarde… Casi a la carrera tuve que prepararme para salir a toda prisa de la casa hacia la parada del autobús. Para colmos estaba nublado y era inminente que muy pronto comenzaría a llover.

Ya estaba llegando al autobús cuando comenzaba a llover y el autobús cerraba sus puertas. “Ya me dejaron y bajo este aguacero” Pero justo cuando me daba por vencida un relámpago ilumina el cielo de azul y el autobús se detiene… Avanzo y alerto al conductor para que me abra tocando desesperadamente la puerta. Al entrar me dice “Te salvaste por ese auto que se me cruzo enfrente”

Ni siquiera mire al automóvil, solo le di las gracias al conducto… busque donde sentarme y comencé a acomodar todo lo que se había desacomodado en mi carrera.

Apenas me senté arrecio la lluvia y de inmediato pensé “Si no hubiese sido por ese automóvil que cruzo frente al autobús ya estuviera empapada bajo ese aguacero”

Al llegar a la escuela el aguacero había mermado un poco y logramos entrar sin mojarnos mucho pero ya adentro no pasaron muchos minutos para que el aguacero volviera y esta vez con truenos y relámpagos.

Unos 20 minutos después y ya en el salón de clases la maestra hace el anuncio ‘Debido a las condiciones del tiempo las clases están suspendidas” “Tienen 15 minutos para abordar el autobús” Nos dijo.

“15 minutos es el tiempo justo para ir al autobús” Pensé muy tranquila y salí del salón. Ya llegando al autobús decidí llamar a mi mama para decirle lo que pasaba. Mi rostro cambio de color al darme cuenta de un pequeño detalle. Había olvidado el celular en el salón.

Desesperad corrí de vuelta. Tenía el tiempo contado… Al llegar mi decepción fue mayor... La puerta ya estaba cerrada… Toque fuerte a ver si alguien habría pero nada…Mire alrededor y al parecer todos ya se habían ido. Corrí de regreso al autobús ya cerca el autobús arranco dejándome en la escuela y en aquellas condiciones de tiempo.

Sin saber que hacer me acomode en una esquina sola, indefensa y a punto de llorar Ya casi asomaban mis lágrimas cuando una mano se posó sobre mi hombro y un paraguas sobre mi cabeza. “Vámonos me dijo” Al alumbrarme la mirada de aquellos profundos azules ojos de luz, solo una pregunta salió de mi alma. “ÁNGEL… ¿Qué haces aquí?”… Su respuesta fue muy simple

“Olvidas que hoy es Lunes “Me respondió

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Capítulo 6

LUNATICO

 

La tormenta arreciaba así que corrimos al auto… Ángel me abrió la puerta y entre. Apenas entre el ambiente cambio. Ya no sentía la lluvia ni escuchaba los truenos… Aquellos inquietantes relámpagos de repente desaparecieron y un remanso de paz se sentía dentro de auto

Con un poco de pena le agradecí a Ángel por su gesto de recogerme. El solo me miro y me dijo “Me imagino que no desayunaste ni has comido nada y como vez todo está cerrado”… “Así es le dije”… Con un inexplicable gesto de ternura entro una mano en su bolsillo y saco varios paquetes de galletas bimba y mientras me las daba me dijo “Sé que no es mucho para alguien que no ha comido nada pero sé que te gustan” Wow! Fue mi expresión… “Son mis favoritas” Como lo sabías le pregunte? Una vez mas no me respondió solo me miro y sonrió como si con aquella mirada lo estuviera diciendo todo.

Ya en el camino a casa y mientras saboreaba las galletas le comencé a contar a Ángel lo que me había pasado en la mañana. “Y sabes si no es por un auto que se cruzó frente al autobús aun estuviera mojándome en la calle” le decía mientras él me miraba y tarareaba una canción que sonaba como un himno angelical

“Si lo se me dijo” No sé si me quede sin palabras o que no podía decir nada pero su aseveración me enmudeció. A mí me enmudeció pero él seguía tarareando aquella melodía que comenzó a apoderarse de mí.

En medio de aquella mágica canción nos acercábamos a la casa… Ya podía ver a Chombo saltando de alegría. Ángel se bajó y me abrió la puerta…Tan pronto baje ahí estaba de nuevo la incesante lluvia los truenos ensordecedores los intimidantes relámpagos que no sentía dentro del auto. Asustada corrí a la casa y ya en el balcón voltee mirar a Ángel pero él se había quedado atrás. Aun bajo la incesante lluvia ahí estaba abrazando a Chombo y hablando a saber de qué cosa.

Ya adentro de la casa y luego de saludar a mi mama y a mi incrédulo hermano nos dijo que tenía que irse. “El tiempo está muy malo” me dijo “Me voy pero te veo el lunes” “ ¿Y porque el lunes?” le pregunte. Me volvió a mirar con aquellos ojos azul de cielo y con una pícara sonrisa me dijo…”Sera porque soy un poco lunático” Se volvió a despedir y corrió hacia el auto. Pero antes de entrar volvió a abrazar a chombo y le dio al**** galletas.

Mientras el auto se alejaba Chombo lo seguía con la mirada y le ladraba como quien se despide y mi hermano preguntaba “¿Ya se fue el loco?

Y yo? Bueno yo quede pensativa y las palabras de Ángel permanecieron transitando por mi confusa cabecita… “Es que soy un poco lunático.”

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Capítulo 7

SKITTLES

 

Estar pensativo y que te interrumpan puede traer consecuencias emocionales y hasta trágicas.

Pensativa estaba cuando salió mi hermano haciendo unos comentarios que perturbaron mi imaginación. “Ya se fue el loco ese?” “De donde habrás sacado tu ese extraterrestre?” “Hasta su auto parece un ovni”

Aunque sus comentarios fueron una broma que a cualquiera le hubiese parecido graciosa, a me pusieron a pensar. Esos comentarios echaron a volar mis pensamientos hasta cada momento, cada situación y cada cosa que habían pasado desde el día que conocí a Ángel.

 

Esa semana fue eterna… Las especulaciones no dejaban en paz mis pensamientos. Estaba ansiosa que llegara el lunes y encontrarme de nuevo con Ángel.

 

Ese día desperté temprano. Era un día feriado y no tenía que ir a la escuela así que decidí hacer algunas tareas y limpiar mi habitación.

En eso estaba cuando sentí los ladridos de Chombo… Esos peculiares ladridos de alegría que solo podían anuncia la llegada de alguien muy querido.

 

Salí y efectivamente ahí estaba Ángel jugando con Chombo y en su tertulia de cada lunes. Tan pronto entro saludo a todos y le dijo a mi mama “El día está muy bonito… Quería invitarlos a la playa”

Luego de un rato de hablar con mi mama salimos al balcón y nos dijo “Voy a buscar algunas cosas y los espero en la playa.

 

Apenas llegamos ahí vimos a Ángel ya acomodado con sillas. Neverita , refrigerios , música y demás.

Fue una tarde maravillosa … Jugamos, comimos, bailamos, nadamos! Bueno nadamos todos menos Ángel. Eso me dio curiosidad así que le pregunte… Porque no nadas? Su respuesta una vez más me dejo pensativa… Una vez más me alumbro con aquella profunda mirada de sus ojos azules de cielo y con su pícara sonrisa me dijo “Olvidas mi nombre? … Soy Ángel y los ángeles no pueden nadar porque se nos mojan las alas es difícil volar con las alas mojadas”

 

Ya oscurecía cuando salimos de la playa. En el camino mi mama decidió entrar al centro comercial a comprar algunas cosas. Yo decidí quedarme afuera con Ángel…Era mi momento para buscar respuestas a muchas de mis preguntas.

 

No sentamos en un banco del lugar y apenas me senté Ángel me dio un bolsito con varios sobres de Skittles. “Sé que te gustan me dijo” Con mi capacidad de sorpresa agotada solo alcance a darle las gracias pero mientras habría los Skittles y el también y sin mirarlo le hice la primera pregunta.

“¿De dónde Vienes?” “¿ De dónde llegaste?” … “Ves aquella esfera azul en el cielo” me dijo también sin mirarme “Pues de allá vengo” Cuando levante la cabeza y mire al cielo miles de estrellas azules adornaban el universo. Sin darme tiempo a reaccionar me dijo… “Pronto tengo que regresar allá”… ” “Pero el día que sientas que me voy búscame al final del arcoíris… ahí estaré”… “Aunque puedes estar segura que siempre estaré a tu lado aunque no esté junto a ti”

Una mezcla de tristeza y dudas invadió mi alma y con un nudo en mi garganta le pregunte… “¿Cuándo te irás?”

Tomando los skittles en su mano y haciéndolos flotar como en un acto de magia me dijo… “Cuando veas una lluvia de colores es porque voy de regreso”

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Capítulo 8

ATANDO CABOS

 

Esa noche no pude dormir… La curiosidad me estaba matando y por fin me había dado cuenta de que Ángel estaba dejando cabos sueltos. Estaba casi segura de que el intentaba hacerme saber algo sin tener que decirlo. Tenía que atar esos cabos y encontrar respuestas. ¿Pero cómo?

 

Una cadena de sucesos comenzó a discurrir por mi memoria como una película en reversa.

La lluvia de colores… Los skittles en sus manos… Los comentarios de mi hermano…Las galletas bimbo… El soy medio lunático… la actitud de Chombo… el misterioso auto frente al autobús… El extraño ambiente celestial dentro de su auto… Su canción angelical… Su espontanea aparición en la escuela… La comida en el restaurant… su aparición el día del accidente… Eran tantas cosas…

 

Casi sin dormir, en la mañana salí decidida a investigar… Apenas entre al autobús le dije al conductor que al llegar a la escuela necesitaba hablar un momento con él. “Por supuesto que sí “Me dijo “Pero siéntate que debemos seguir”

 

Ya en la escuela espere a que todos bajaran y le pregunte… “¿Recuerda usted el lunes pasado cuando el auto se cruzó frente a usted?” “Claro que lo recuerdo” me dijo… “¿Y vio Usted el auto?” “La verdad que apenas vi las luces traseras… El rayo que torno todo azul me cegó y cuando abrí los ojos ahí estaba el auto frente a mí… Cuando entraste que cayó el segundo rayo azul el auto desapareció y ahí nos fuimos” “¿Porque lo preguntas? “

No pude responderle… Solo le dije “Por nada… Gracias” y Salí corriendo.

 

Ya dentro del salón de clases y mientras arreglaba mis cosas no podía dejar de pensar en lo que me dijo el conductor y ni en el más lejano rincón de mi memoria encontré un recuerdo del rayo azul del cual él me hablaba. No podía dudar del conductor pues me lo dijo con mucha seguridad y aparte de que sabía que era una persona muy seria.

 

Ese día pregunta a varias amistades que estaban en el autobús por lo del rayo azul… Al parecer nadie lo había visto. Eso me llevo a otras interrogantes…

Fue una ilusión óptica del conductor? Y si no lo fue porque solo él lo vio y nadie más.

 

Esa tarde volvía mi casa una vez más con más preguntas que respuestas… Pensativa estaba cuando escuche al Chombo ladrar y esos ladridos me trasladaron al día del accidente… Yo también había visto esa luz azul el día del accidente y la primera vez que Ángel se despidió de Chombo.. Pensándolo bien la había visto más de una vez pero no le había prestado mucha atención pero el día de Chombo si me estuvo raro.

Esos pensamientos me llevaron a un recuerdo espontaneo… Ese día Ángel le entrego un papel a mi mama con los datos del accidente.

Corrí como una loca buscando por la casa el ahora ansiado papelito que me ayudaría a seguir Atando cabos.

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Capítulo 9

UNA CAJITA DE SORPRESAS

 

La noche no me alcanzo! Ni la semana tampoco. Cuando usted no quiera ver más una cosa désela a mi mama para que la guarde… Ella si tiene la habilidad de los magos legendarios y puede hacer desaparecer algo como si nunca hubiese existido. Ese papelito era un ejemplo de sus habilidades prestidigitadoras. Ni modo… Había que seguir buscando.

 

Ese lunes me desperté inusualmente temprano… No sé porque los días en que voy al le escuela es cuando más tarde me despierto. Me había despertado con un hambre terrible y mientras intentaba buscar que comer en la cocina unos reconocibles ladridos de Chombo desviaron mi atención. “Creo que no eres la única que se despertó temprano” burlonamente me grito mi instinto. “Ve a ver” Grito mi curiosidad.

Efectivamente cuando Salí al balcón, ahí estaban aquellos dos esta vez secretándose o tal vez solo dialogando como quien no quiere que lo escuchen.

Tan pronto notaron mi presencia ambos me miraron… Ángel sonrió y se acercó sonriente. Me saludo como siempre poniendo su mano sobre mi hombro y mirándome con aquella profunda mirada de aquellos ojos azul de cielo.

“ Les traje algo para el desayuno” me dijo mientras me entregaba un bolso. “También te traje de ese pan que tanto te gusta y algunas uvas”

“Tengo que irme pero en un rato regreso para llevarlos a la escuela… El autobús parece que no pasara hoy “Me dijo muy seguro de lo que decía.

 

El día ya estaba muy caluroso así que me apresure a vestirme para no estar dentro de la casa. Justo terminaba de prepárame cuando nuevamente llego Ángel. “Apúrate que ya llego Ángel” le grite a mi hermano. “Oh… Olvidaba que hoy nos iríamos en el ovni” Me respondió mientras sonreía.

Tan pronto mi hermano noto que no había acondicionador de aire en el auto puso una soberana cara de espanto… pero esa carota no le duraría mucho tiempo

Tan pronto cerramos las puertas el habiente de paz en el auto la natural fresca temperatura y la música de Ángel hicieron cambiar totalmente el rostro de mi hermano. Algo que rápidamente noto Ángel que con su pícara sonrisa le dijo “Bienvenido al ovni” lo que casi le provoca un desmallo a mi hermano.

 

Así, mirando la cara de búho confundido de mi hermano llegamos a la escuela! Él se bajó del auto absorto en su confusión, mientras yo me quede afuera hablando con Ángel. Habían tantas cosas que le quería preguntar y el tiempo era escaso así que de inmediato le pregunte… “Porque no me dices todo sobre ti? A veces siento que no me has dicho toda tu verdad?” “Nunca te he dicho una mentira… Si te la dijera quizás me creerías pero si te digo la verdad la pondrías en duda” “Toda la verdad está en donde tu estas buscando una mentira y todo lo que buscas al final, siempre estuvo en el principio” Me dijo… Porque tienes que irte? Le pregunte. “Todas las cosas tienen una razón de ser que hoy no entiendes pero algún día comprenderás” “que me tenga que ir no implica que te abandone” me decía mientras me miraba con aquella mirada profunda de sus ajos azul de cielo. Diciéndome esto se sacó aquel misterioso cofrecito que colgaba de su cuello y con un indescriptible gesto de ternura me dijo “El día que lo puedas abrir comprenderá lo que te digo”

“Que es?” Le pregunte

El … Mirándome a los ojos mientras ponía el cofrecito en mis manos me dijo…

“Es solo una cajita de sorpresas” … Ya despidiéndose me dijo “Nos vemos el lunes en el restaurant”

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Capítulo 10

MILAGRO ANGELICAL

Esa tarde cuando llegue a la casa ya mi hermano estaba ahí y su rostro lo decía todo… Ya ni el auto le parecía un ovni ni Ángel un loco. Mientras yo trataba desesperadamente de abrir la “cajita de sorpresas” mi hermano comenzó su interrogatorio… “Quién es?” “Como llego?“ ”De dónde vino?” Me hiso todas las preguntas imaginables… Las mismas que yo también me había estado haciendo todas estas semanas.

Confieso que la paciencia no es mi fuerte pero ese día me arme de ella y así vestida de esa en mí hasta ese momento desconocida virtud le conté a mi hermano cada detalle sobre Ángel… Sus misteriosas acciones , Sus palabras, sus gestos , sus actos de buena fe … Todo y cada detalle que guardaba en mi memoria.

Eso quizás despertó el instinto detectivesco de mi hermano que sin pensarlo mucho y mientras yo infructuosamente intentaba abrir la “Cajita de sorpresas” me dijo… “Pienso que él ha estado tratando de hacerte saber algo sin decírtelo… “Vamos a investigar”

“Ya he investigado algunas cosas “ Le dije… Contándole mí platica con el conductor del autobús… “Pero ando buscando un papelito que le dio Ángel a Mamá el día del accidente”

“Las cosas nunca aparecen cuando uno las busca” me dijo, haciendo un gesto de frustración.

 

Esas palabras de mi detectivesco hermano me hicieron recordar mi reciente dialogo con Ángel “Todo lo que buscas al final, siempre estuvo en el principio”

Ansiosa y llena de curiosidad fui a la sala… el primer lugar en el que había buscado el papelito… Ahí junto al televisor (como esperando mi llegada) estaba el tan buscado pedazo de papel. Quería correr a comunicarme con las personas que allí aparecían pero mi hermano me convenció de que no era lo correcto. Mejor hablemos con Mamá y que ella haga las gestiones me dijo.

Eso fue justamente lo que hicimos y ella no muy convencida de la necesidad de emprender esa aventura decidió ayudarnos. Inmediatamente llamo a los lugares que debíamos ir y acordó ver a el agente que atendió el caso el día siguiente en la mañana y al conductor del camión el mismo día al mediodía.

 

Esa mañana al llegar al cuartel policiaco ya el agente nos estaba esperando. Con los archivos del caso en la mano nos recibió y nos habló de los pormenores del caso. Cuando le pregunte por la lista de testigos me mostro un documento en el que aparecía el nombre de Ángel… le insistí al agente en preguntarle sobre la persona que me ayudo y que le dio los datos y solo me dijo “Su nombre estaba ahí … No sé cómo desapareció”

Algo decepcionados salimos del lugar hacia la escuela pero ya al mediodía nos fue a buscar Mamá para ir a ver al conductor.

“Que alegría me da saber que estés bien” me dijo…”Ese día cuando vi tu rostro de pánico frente a mi camión y que no me podía detener casi me muero de angustia” decía con cara de tristeza…. “Mi rostro frente al camión?” Pensé… De inmediato le pregunte “Y no vio la persona que estaba detrás de m?”

“No había nadie detrás de ti… solo te vi volar por el aire como 30 pies y cuando me acerque y me baje del camión para ayudarte estabas de pie junto a un joven de ojos azules y varios curiosos. La duda se volvió a apoderar de mí… Si Ángel me había dicho que por suerte él estaba detrás de mí y le dio tiempo a apartarme de la ruta de camión Y yo misma sentí sus manos en mi cintura… Como fue que el conductor no lo vio?

El conductor al notar mi rostro pintado de dudas me dijo… ****es agradecer a Dios que estés con vida porque después de lo que paso ese día que aun estés aquí solo puede ser producto de un Milagro Angelical

 

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Capítulo 11

AL FINAL DEL ARCOIRIS

 

“Un milagro angelical” … Esas palabras retumbaban en mi cabeza como el eco de un tambor… Eso y la misteriosa desaparición del nombre de Ángel de los archivos policiacos era algo para ponerse a pensar.

Habíamos estado en realidad ante la presencia de un ser místico? Ahora que lo pensaba bien, nunca le pregunte el nombre a Ángel… Solo le pregunte quien era y me dijo “Soy Ángel” “Nunca te he dicho una mentira… Si te la dijera quizás me creerías pero si te digo la verdad la pondrías en duda”

Sus palabras transitaban por mi mente una tras otra mientras desesperadamente trataba de abrir “la cajita de sorpresas”

“Todas las cosas tienen una razón de ser que hoy no entiendes pero algún día comprenderás” … “Ves aquella esfera azul en el cielo” “Pues de allá vengo”

Las piezas del rompecabezas comenzaban a caer en su lugar y un dejo de tristeza se apodero de mi corazón. De pronto recordé sus palabras cuando me entrego su “Cajita de sorpresas”… “Que me tenga que ir no implica que te abandone” y apretando la cajita sobre mi pecho pensé “Se ira y no podre despedirme de él?”

 

Ese lunes amaneció nublado y eso acompañado de mis ageustias era bastante tormentoso. Lo que me alegraba un poco era el pensamiento de que quizás vería a Ángel en la tarde en el restaurant.

 

La ausencia de algunos maestros hiso que saliéramos temprano de la escuela. Pasado el mediodía mamá llego a recogernos. Ella había decidido que como el día estaba algo tormentoso iríamos todos juntos al restaurant. Ya que habíamos salido temprano de la escuela llegaríamos temprano a la casa con tiempo suficiente para prepararnos y salir.

Poco antes de las tres de la tarde salimos de la casa… Aunque no llovía estaba muy nublado y eso hacia la visibilidad muy difícil. Ya casi Mamá estaba decidida a regresar cuando una luz azul a nuestro lado nos ilumino el camino. “Es Ángel pensé” pero decidí no decir nada.

Al llegar al restaurant notamos algo sorprendente… Chombo aparentemente nos había seguido desde la casa y ahí se había acomodado cerca de la entrada del restaurant. Una vez nos cercioramos de que estaba bien entramos. Mire a todos lados pero no vi a Ángel

 

La mesera llego y nos sirvió la cena aun sin que ordenáramos y exactamente lo que pensábamos ordenar. Todos nos miramos como preguntando uno al otro “Tu ordenaste?”

Yo comí muy poco… Saber que Ángel no había llegado me hiso perder el apetito. Una vez terminamos de cenar mi mama pidió la cuenta. “Ya el muchacho pago” Nos dijo la mesera… “Cual muchacho?” Preguntamos todos a la vez… “Ese de los ojos azules que va ahí” respondió ella, mientras señalaba la puerta.

A juzgar por la expresión en nuestros rostros, todos habíamos visto lo mismo…Un destello de luz azul traspasaba la puerta y se detenía justo al lado de chombo. Los tres corrimos afuera y ahí estaba el chombo meneando su cola y comiendo esas galletas que tanto le gustaban… La destellante luz azul se había convertido en una luciérnaga de tonos azulados… Luego de acariciar a Chombo me acerque a la ya pequeña luz azul. Un extraño escalofrió se apodero de mi cuerpo al sentir aquella mano que tantas veces me había consolado posarse una vez más sobre mi hombro y aquella misteriosa luciérnaga elevarse al cielo convirtiéndose en un hermoso arcoíris… “Vámonos” grite desesperada… Ellos no lo sabían ni lo entendían hasta ese momento… Pero por mi mente había pasado en ese instante la vez en que Ángel me dijo “Pero el día que sientas que me voy búscame al final del arcoíris… ahí estaré”…

 

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Capítulo 12

MI ANGEL DE LUZ

En aquel momento el tiempo era oro, así que a la prisa le dije a mi mama lo del arcoíris.

Era evidente que ella estaba convencida de que en Ángel había algo sobrenatural. A gritos nos condujo al auto junto con chombo y emprendimos una loca carrera en busca del final del arcoíris. El final del arcoíris se veía cada vez más estrecho y por momentos sentía que desaparecería si encontrar a Ángel.

 

Aquel cada vez más estrecho arcoíris nos estaba llevando a aquella playa en que un día estuvimos con Ángel y allí justo donde terminaban sus colores y en medio de una esfera de luz azul esta él.

 

Con aquella profunda mirada de sus azules ojos y la pícara sonrisa de siempre salió de la esfera… Acaricio a Chombo con el mismo amor de siempre… Se acercó a mi mama y puso su mano sobre su hombro sin decir nada… Se acercó a mi hermano y con una mano le dio unas palmaditas mientras ponía la otra sobre su hombro.

 

Luego y muy despacio se acercó a mí también puso su mano sobre mi hombro y luego y por primera vez me abrazo… Yo también lo abrase… No sé por cuánto tiempo pero cuando abrí los ojos aunque aún sentía su abrazo ya él no estaba ahí. Había regresado al centro de aquella esfera azul en donde había estado cuando llegamos y aquel opaco arcoíris comenzaba a recobrar su esplendor tornándose en una pista de luces que llegaba hasta aquel universo de estrellas azules que adornaban el cielo el día que le pregunte a Ángel de donde venía.

 

Trate de acercarme a él pero una impresionante lluvia de skittles me detuvo haciéndome recordar una vez más sus palabras… ” “Cuando veas una lluvia de colores es porque voy de regreso”

 

Antes de que pudiera reaccionar un destello de luz cegó nuestros ojos por un instante A recobrar la vista todos vimos como aquel destello de luz viajaba al infinito por aquella interminable pasarela de colores . En un abrir y cerrar de ojos todos la estrellas azules cambiaron de color … Solo una quedo con el azul que iluminaria mi vida para siempre

 

Los ladridos y saltos desesperados de chombo …La mirada al cielo de mi hermano, el rostro confundido de mi mama, eran un indicio claro de que Ángel se había ido. En silencio emprendimos el regreso a la casa.

 

Ya en mi casa y a solas llore… todas aquellas lagrimas que durante tanto tiempo estuvieron al borde de mis ojos decidieron lavar mi tristeza mientras apretaba contra mi pecho la “Cajita de sorpresas”

En mi momento de más angustia una de mis lágrimas alcanzo a tocar la cajita que de inmediato se abrió dejando salir de ella la misma luz azul que tantas veces antes había visto. La luz giro varias veces a mí alrededor hasta convertirse en una hermosa mariposa azul que se posó sobre mi hombro… El mismo hombro sobre el que tantas veces Ángel había puesto su mano. Luego de estar posada por un rato en mi hombro voló a mí alrededor convirtiéndose de nuevo en luz y regresando a la cajita de sorpresas que de inmediato se volvió a cerrar. Instintivamente mire mi hombro y sobre él había una cinta de ceda igual a la que sostenía el cofrecito. La tome y al extenderla vi una letras que de algún modo me devolvieron la alegría. Ahí estaba el mensaje de Mi Ángel de luz

 

“ Estaré siempre a tu lado aunque no esté junto a ti”

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Epílogo

 

Todos tenemos un Ángel con el que alguna vez en la vida nos tropezamos. Algunos logramos reconocerlo y otros lamentablemente no…

Yo logre reconocer el mío y aprendí a quererlo y a respetarlo; Aprendí a respetar sus espacios y esperar por él y por sus acciones cuando él lo considere necesario (No cuando mis caprichos lo exijan) Cada día yo y mi familia pensamos en él y lo recordamos con cariño, con respeto y con amor.

Entendimos que el siempre estará a mi lado aunque no esté junto a mí.

 

Por eso si algún lunes al atardecer usted pasa por una playa y ve una familia con un perro en la orilla contemplando el cielo de seguro esa familia es la mía

 

Y es que desde el día en que Ángel se fue cada lunes vamos al restaurant y luego a la playa a mirar el cielo y contemplar aquel lucero azul que cambio mi vida para siempre.

También a jugar con mi cajita de sorpresa y a esperar que una lluvia de colores y un infinito arcoíris traigan de nuevo a mi Ángel de luz…

 

>AJENONY<