Hoy estas aguas siempre tuyas
-flexibles láminas de plata-
sobrecogen con su vaivén de insomnio perdurable.
Hoy ese rumor de música cayéndote en los ojos
es monotonía de olas y alientos,
es sal petrificada y fría.
Hoy esa nación sin patria
que fue nido y guarida bienamada,
entrañable refugio y confidente,
es sólo mar donde naufragan tus alas.
- Autor: Basilio Dobras Ramos ( Offline)
- Publicado: 9 de agosto de 2018 a las 16:51
- Categoría: Triste
- Lecturas: 9
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.