Oh, Señor, por qué nos has abandonado.? Oye, nuestros ruegos: Estamos en la intemperie; nuestros estómagos están heridos y sangran. El día se ha convertido en noche horrorosa y la noche en vigilia desesperante. Oh, Señor, yo creo en ti; creemos en ti: millones de oraciones suben, como vapor puro, buscándote. Mete tu santa mano. Queremos paz, queremos armonía, queremos el pan para todos. Que la normalidad se haga sol y aire. Oh, Señor, ahuyenta a los que nos hacen daño.
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Autor:
Pablo Rilke. (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de agosto de 2018 a las 14:56
- Categoría: Sin clasificar
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Offline)
Comentarios1
Un ruego nacido desde el interior ,por los momentos que están viviendo miles de personas ojalá la solución llegue en forma rápida para calmar los sufrimientos de personas inocentes.
Un saludo fraternal que irá en el vehículo de mis oraciones.
Muchas gracias poeta Gaston Campano por tu alto sentido de solidaridad. Un abrazo.
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