Oigo
No veo.
Si oigo y no veo
la imaginación
toma las riendas.
Si veo y no oigo
la imaginación aferra
el timón si sé que a
lo que veo le nace
un sonido
Si veo, oigo y no sé, la
imaginación late quieta,
sin salir de su escondrijo.
Concluyo: La imaginación
llena los charcos con su lluvia
cuando el verdor del parque
se amarrona suspirando su
maná.
Pienso
No hablo.
Si pienso y no hablo
la imaginación me presta
sus alas.
Si hablo y no pienso
la imaginación aguarda a
que escampe.
Si pienso, hablo y no sé, la
imaginación brinca alborozada,
zapatea inasequible al desaliento
hasta llegar a puerto desconocido,
sin apenas volver sobre sus pasos.
Concluyo (para no cansar): Si no
viene a casa la imaginación la vida
lamentará cuan larga es.
- Autor: Albertín (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de septiembre de 2018 a las 15:19
- Comentario del autor sobre el poema: Si a un pájaro le cortamos las alas...
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 79
- Usuarios favoritos de este poema: Henar Tejero Pascual, Ana Maria Germanas, Alexandra L
Comentarios1
Que tema has elegido Alberto !!..., y es exactamente tu imaginacion, ña que te ha ayudado a estructurado....
De una bella forma, por cierto....,sin imaginacion, solo fuesemos,voz sin eco...vision sin horizonte....puerta vedada a la esperanza ...alma ahita de ensueños...
Sempre me inspiras ...como te quiero. amigo mio !!
Un enorme abrazo...
Te devuelvo tu amor, y lo sabes. Un beso enorme Ana.
Siempre al otro lado del espejo...
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.