He llenado mis ojos de ti,
de todos esos tesoros que escondes
pero que en brillo propio asoman
y evidencian el valor del que dispones.
¿Que me diferencia a mi de un avaro,
si la misma ambición del hombre cargo
y en usura pretendo hacerme de ti
para alimentar mi codicia?.
Poco importa que no persiga oro
si en hacerme tu mecenas pretendo
despojar al mundo de toda tu valía.
Cada hombre elije su moneda de cambio;
algunos buscan oro, otros ovación,
sin embargo, yo ambiciono un gozo exclusivo:
ser acreedor único de todos sus afectos.
- Autor: Aarón Kráuss (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de octubre de 2018 a las 00:31
- Categoría: Amor
- Lecturas: 57
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