Ninguna
Nosotros, mi querido Olafo,
nietos del Sol y de un pasado inmenso,
unidos por la magia del humor,
la inocencia y la ternura,
lloramos ahora que tu padre partió
cuando menos esperábamos su viaje
al reino de la sombra... o de la luz.
Que sus hijos de sangre continúen
con idéntica bondad
tus constantes y graciosos desafueros.
Que sigan esparciendo como él
sobre mis falsos o dudosos versos
el mismo delicado polvillo de alegría.
Jamás olvidaremos sus presentes
ofrecidos a través de tus conquistas.
Y quiera Odín que Fuso,
más inspirado que todos los escaldos,
poetice su partida y nuestra orfandad sin límites.
Que Cuak con sus graznidos
desordene la paz de los contornos
mientras tú y yo, querido hermano,
denegamos la tregua a los que intenten
arrojar su testamento
al cauce sin memoria del tenebroso río.
- Autor: 000 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de octubre de 2018 a las 15:52
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
Comentarios1
Leerte es garantia de buen gusto amigo Verano...
Ese final de tu verso es brillante !...
Saludos..
Gracias Syol, por tus conceptos. Recibe un cordial saludo.
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