Y a pesar de todo, qué más da,
ya estás muerto, frio, sin nada de vida,
sin nada de alma
Ya no estás aquí, conmigo,
Con nosotros, ni allí, ni allá,
ni en las telarañas de la casa, ni en el polvo de mi auto
En ningún lado
Ni en el aire, ni en la luz,
ni en este mundo, no sé si en el otro
tal vez…
Ni en la sombra de la noche, ni en lo claro del alba
ni en el frio invierno, ni en los veranos en calma
A pesar de todo, qué más da
si ya estas muerto, tan muerto, tan intocable, tan distante,
como nadie lo había estado en mí jamás
como nunca nadie lo estará
Tu vida se me presenta como viejas diapositivas
que se proyectan en pedazos especiales todos los días
en mi mente;
Un bebe llorando, un niño riendo,
un adolescente soñando, un joven volando
En tu lozanía,
hasta el derrumbe de mi vida
el día de tu partida
A pesar de todo, qué más da
si ya estás muerto, inmóvil, completo
pero muerto
Sueño roto
Quisiera olvidarte pero no puedo,
que quieres que haga si solo soy un viejo ridículo
que no sabe olvidar,
y en mi vida que resta te he de recordar.
Serás recuerdo fugas de muchos,
ignorado de unos pocos,
pero añorado por mí, por nosotros.
Porque tú partida a mi corazón dará vida
En el optimismo de los amaneceres,
y en la melancolía de los atardeceres,
vivirás tú.
En el sonido de un celular
o en el olor de la arena del mar.
vivirás tú
En la intensidad de las lluvias de septiembre
o en las fiestas de diciembre,
vivirás tú
En el aparecer de un arco iris esplendoroso
En el despertar de un bebe hermoso
el primer movimiento de su dedo índice
en lo místico de un eclipse
vivirás tu…
En la niebla de las mañanas en los arroyos
que cubre su superficie con un calido velo
y formara corazónes en su remolino
que se elevara todos los días hasta donde tu estas
alla en el cielo
Para mi amigo Rene
- Autor: TRISTE TROVADOR (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de octubre de 2018 a las 00:59
- Categoría: Carta
- Lecturas: 28
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