I
A ti mujer virtuosa
En esta mañana preciosa
Te pido con mi oración
Que dejes todo en las manos
¡De mi amado redentor¡
Deja que su amor puro y divino
Sane todas tus heridas
Hasta transformar tu vivir
Para perdonar la inclemencia
De aquel que en su indecencia
Mancillo tu inocencia
Y perjudico tu integridad
Al mentir y desolar
Con su odio tu existencia
II
No permitas que el enemigo
Con su continúo engaño
Te aleje del peldaño
Que Dios te coloco en tu camino
De ser día a día fortalecida
Con la unción del altísimo
El aceite que te purifica
Y de tu alma aleja
Todo aquello que es indigno
Perdona a quien te maldijo
Porque nada podrá perjudicarte
Porque el manto divino
Es quien resguarda tu vida
Ahora, mañana y siempre
III
Deja todo en las manos del eterno
Porque él sabe de tu dolencia
Y con su amor y su paciencia
Mitigara todo el dolor
Que taladra y envenena
Tu precioso corazón
Y el cómo no se equivoca
Peleara en tu nombre
Y jamás te hará perecer
Porque él está a tu lado
Hará que el malvado
Pague por su inclemencia
Y pronto veras como su amor genuino
Restaurara y sanara tu alma
IV
Llénate de valentía
Y avanza sin detenerte
Que Dios quiere bendecirte
Por tu ímpetu de guerrera
Mujer de alma valerosa
Que se levante del infortunio
De la tormenta impetuosa
Que quiso hundir su embarcación
Mujer con herramientas virtuosas
Porque su confianza has centrado
En el poder del soberano
Tu único y fiel amigo
Su escudo y tu abrigo
Cuando todos te han fallado
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
28/10/2.018.
07:35 A.M
- Autor: Poetisa de Jesucristo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de octubre de 2018 a las 08:38
- Comentario del autor sobre el poema: ¡Nada me hará sucumbir, ni de tu poder vaciar, porque delante de mí siempre va, mi creador y mi dueño¡
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 49
- Usuarios favoritos de este poema: Josefina Bravo
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