El talento que se fue

México con sus muchos años,

En su tierra ha criado grandes artistas,

Con sus recuerdos que se convirtieron sueños,

Y sus obras un camino de huellas.

La calaca su arte tanto extrañaba,

Pero sus obras y biografías no alcanzaban,

Dar un viaje en el tiempo decidió,

Para deleitarse y sobretodo recordarlos.

Primero fue con José Ma. Velasco Gómez,

Un gran paisajista que el valle de México mucho plasmó,

Que son de gran importancia en la geografía por sus aportes,

Y una de sus pinturas hasta el Vaticano llegó.

Luego llegó con el famoso Dr. Atl,

Quien combinó el arte con la vulcanología,

La técnica Atl-color logró crear,

Más asombrada la flaca no podía estar,

Pasó con Diego Rivera y el muralismo,

Mostrando la clase trabajadora y el comunismo,

Forma parte de la historia por su arte y su relación con Frida,

Dos grandes artistas en una aventura de ternura-tragedia.

David A. Siqueiros pintaba a la clase trabajadora,

Al igual que las tradiciones de nuestro país,

Junto con Orozco y Rivera, eran el movimiento muralista,

Sin embargo, la huesuda su travesía debía seguir.

Pasó el tiempo la calaca y se encontró a José C. Orozco,

Pintando sus ideas sobre la sociedad,

En la Suprema Corte de Justicia había visto sus frescos,

Se despidió y con el siguiente artista se topó.

Rufino Tamayo dejó mucho que admirar,

Combinando técnicas y arte mexicano tradicional,

Con su musa y esposa se volvería un artista experimental,

Pasando a la historia por su credo de mexicano internacional.

Regresó a 1939, viendo a María Izquierdo en Nueva York.

Luchando en favor de las mujeres junto con Frida,

Que no le impidió ser una gran artista,

Por su fuerza y valor, huella ella dejó.

Luego fue a ver a reconocida Frida Kahlo,

Pintando su realidad con el folclor mexicano,

Mostrando su potencial y su conmovedora esencia,

A pesar de las malas vivencias e injusticias.

La flaca le costó pronunciar Günter G. Wendland,

Un artista que entre Europa y México un equilibrio creativo encontró,

Formando parte de la conocida Generación Ruptura,

Fanático y sentimentalista del surrealismo,

Con José Luis Cuevas su recorrido la huesuda terminó,

Bautizado por el New York Times el Mexican boy wonder

No negaba su pensamiento de ciertos sectores del país,

El último pintor que a nuestro mundo le dijo adiós.

La calaca al presente regresó,

Dejando esa experiencia consigo para siempre,

Llevando su arte dentro del corazón,

Recordando el talento que se fue.

P. Rarity