Es por Ella que las rayas blancas de la carretera, lo son más todavía. Los montes que diviso a lo lejos, me parecen los del Montblank, recién nevados para Ella. El desguace, el museo Guggenheim de Bilbao. El puentecillo sobre el río, un canal cualquiera de Venecia, donde al son de barcarola pasear con Ella.
El Guadarrama es ahora, el mismísimo Guadalquivir a su paso por Sevilla, la tierra de mi tierna y hermosa doncella. El ayuntamiento, el Palacio de Versalles, pues Ella es mi Cenicienta. Mi coche, de repente un Lamborghini y mi iglesia, la de la Almudena, donde casarme con Ella. Bajo el espejo retrovisor y no soy yo ¡Soy Alain Delon sonriéndole a Ella!
Mi pueblecito, una aldea de Asturias y tú mi amor, una dulce lechera. El bar de carretera, un parador nacional y la gasolinera cerrada que está cerca, un monasterio de dominicos escribiendo en papiros nuestra historia. Las tabacaleras abandonadas, mansiones de “Lo que el viento se llevó”, donde para siempre vivir con Ella.
Sí, verdaderamente estoy enfermo y tú tienes la culpa de mi desvarío. Me has embrujado con la magia negra de tus ojos. No, no tengo arreglo, mas adoro estar desarreglado contigo siempre en mi cabeza ¡Bruja, más que bruja! Mi embrujo de ojos de azabache, mi hembra. Ese eco que repiquetea incesante en mi cabeza…¡Ella, Ella, Ella!
Pilar González Navarro
Octubre 2018.
- Autor: Pilar Gléz Navarro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de noviembre de 2018 a las 06:33
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
Comentarios2
hermoso niña..ella..escrita con sentimiento,,con ese sentido hermoso que es el amor..saludos y felicidades
Jajaja. No tan niña, pero me encanta!!.Mil besos
Preciosa declamación!👏👏
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