Las rejas del patio antiguo
donde piernas escarchadas
esperan estrella y sol
con retorcidos colores.
Cordones tensos sudados
en cada tarde sin falta;
solo el árbol a medio pecho es el testigo perfecto
de tus carreras templadas antes que llegue el silencio.
Sudor de masas flotando en carretones abiertos,
seguidos de mansas canciones de pelo largo en el suelo.
Se teje de aroma el cielo
mientras te canto azulejos,
revives en caldo lento de ojos tormentos de miedos,
resuena la callejuela alegre porque te vas en incendios,
por el maizal desencanto negro aguacero incierto.
- Autor: ger_art ( Offline)
- Publicado: 4 de noviembre de 2018 a las 19:12
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 13
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